Por contaminar las aguas del río Fucha, la Secretaría de Ambiente de Bogotá ordenó suspender las operaciones de varios vehículos de carga que adelantan las obras del centro comercial El Edén, ubicado en el occidente de la ciudad.
Según pudo establecer la autoridad ambiental, los residuos de construcción y demolición que transportaban los automotores terminaban en el afluente. Adicionalmente, fruto del mal manejo de los residuos se estaba afectando el espacio público en las vías aledañas a la obra por la propagación de escombros que daban a parar a la red de alcantarillado.
Tras una inspección de control, la Administración responsabilizó de estos hechos a la constructora ‘Construcciones Planificadas’, a cargo de las obras, dado que “estaba permitiendo la salida de los vehículos relacionados con el proceso constructivo (mixer, volquetas y demás) con exceso de carga y sin el correcto estado de limpieza”.
Por estos hechos, la Alcaldía selló temporalmente la entrada y salida de vehículos de carga que se encontraban operando en la construcción. Se trata de establecer además si se estaría incumpliendo con la norma que fija los lineamientos de la guía de manejo ambiental para el sector de la construcción.
“Estas conductas están tipificadas en el Código Penal como un delito ambiental y puede acarrear penas de cuatro a nueve años de cárcel y multas de hasta 50.000 salarios mínimos legales vigentes”, advirtió la Secretaría de Ambiente.
La Alcaldía anunció que intensificará los operativos de control en toda la ciudad para dar con quienes contaminan el ambiente y elevó un llamado a las empresas constructoras para que cumplan con la normatividad para el manejo de residuos de construcción y demolición.