Ciencia “made in” Manizales para enfrentar el COVID-19

Varios proyectos se están llevando a cabo desde Caldas para hacerle frente a la pandemia. Un sistema de Inteligencia Epidemiológica y una iniciativa para hacer telemedicina son dos de ellos.

Juana Valentina Bustos*
07 de mayo de 2020 - 11:30 p. m.
El Instituto Nacional de Salud (INS), a través de la Dirección Territorial de Salud de Caldas, validó todos los requerimientos necesarios para habilitar el análisis de las muestras. / AFP
El Instituto Nacional de Salud (INS), a través de la Dirección Territorial de Salud de Caldas, validó todos los requerimientos necesarios para habilitar el análisis de las muestras. / AFP

La manera de comunicarnos, de socializar, de trabajar e incluso de salir a la calle son un antes y un después del virus. Y mientras entendemos el reto de adaptación, los científicos del mundo parecen correr una triatlón para descubrir una vacuna contra el SARS-CoV-2 o mejores tratamientos, pero aún así, nada parece lo bastante claro.  (Lea Esta es la situación del COVID-19 en Colombia en tiempo real)

En Colombia, el virus llegó el 6 de marzo pasado y desde entonces las universidades del país activaron varios procesos sociales y científicos. En el Eje Cafetero, la Universidad de Caldas ha liderado este ejercicio con iniciativas y proyectos que ayudan a mitigar los riesgos de la pandemia. Un modelo de inteligencia epidemiológica para entender cómo mueve el virus nuestras vidas, un laboratorio molecular para el procesamiento de pruebas de la región, una producción a escala de máscaras faciales para el personal de salud y el fortalecimiento de la telemedicina, son algunas de estas. 

Anticiparse a las consecuencias del coronavirus

Investigadores de España, Chile, Canadá y Colombia se preguntaron qué hacer frente a este brote que la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó como pandemia. Su preocupación era clara: si las grandes potencias del mundo flaqueaban en la toma de decisiones que tendrían posteriormente repercusiones económicas, los países de Latinoamérica, por ejemplo, se verían expuestos no solo a una crisis sanitaria, sino también a una crisis económica sin precedentes. 

Las medidas de control implantadas por los gobiernos para reducir la diseminación de la infección tales como cuarentena obligatoria, el distanciamiento social y el aislamiento de los pacientes contagiados, suponen también un pare en la actividad económica que sostiene el país. Además, encontraban necesario anticiparse a un número de pacientes que requerirían atención en las unidades de cuidado intensivo para tomar medidas. 

El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación abrió la convocatoria Mincienciatón para la financiación de propuestas alrededor de la COVID-19. Fueron más de 700 iniciativas presentadas de las que sólo 25 fueron seleccionadas para su financiamiento, entre esas, el Sistema de Inteligencia Epidemiológica de la Universidad de Caldas, en el que también participa Bios como coejecutora, la Dirección Territorial de Salud del departamento y la Secretaría TIC y de Competitividad de la Alcaldía de Manizales como acompañantes. 

El alma máter caldense, junto con la Pontificia Universidad Javeriana, Universidad EAFIT, Universidad de La Salle y la Corporación para Investigaciones Biológicas, logró quedar en la lista de seleccionados. Este proyecto cuenta con un presupuesto de $730.275.000 para su desarrollo. 

“Lo que buscamos es poder entregarle a quienes toman decisiones en política sanitaria más evidencia para que esas decisiones sean mucho más precisas y tengan mayor impacto”, afirma Alejandro Ceballos Márquez, rector de la Universidad y científico líder del sistema. 

El modelo epidemiológico comprende tres fases principales.  La primera tiene que ver con el diseño de un modelo matemático que interiorice el contexto de Colombia y en el que se alojen datos como la tasa de contacto, duración de la infección y el tiempo que transcurre entre la infección y la aparición de los síntomas. Este primer momento de recolección de datos e información se realiza a través de la aplicación Registro COVID-19 que lidera el programa de Telesalud de la misma institución.

En un segundo momento, se diseña una estructura de almacenamiento en el que los datos entran a un proceso de análitica, aprendizaje automático y aprendizaje profundo que permitirá realizar un seguimiento de la información y visualizar la propagación georreferenciada del virus, “con esto lograremos hacer predicciones basadas en el comportamiento de los datos”, comentó el profesor de la Facultad de Ingenierías, Luis Fernando Castillo Ossa. 

Finalmente los datos arrojados por el sistema se integran a un modelo económico que permite hacer evaluaciones financieras para conocer en tiempo real el impacto de las medidas que se toman dentro de la contingencia sanitaria. 

Medicina a través de la pantalla 

Aunque de este tema poco se conocía antes del nuevo virus, Telesalud lleva alrededor de 19 años prestando sus servicios en más de 114 municipios del país. El modelo no solo permite una comunicación remota entre el profesional y quien consulta, sino que también es capaz de capturar datos de manera unificada en tiempo real para determinar las poblaciones más vulnerables, el tráfico de virus y las medidas de control pertinentes para el departamento. Además, se convierte en la base de datos que alimenta otras estrategias claves como el Sistema de Inteligencia Epidemiológica. 

Durante la emergencia sanitaria, el Gobierno Nacional expidió el Decreto 538 del 12 de abril del 2020 con el que se que buscaba el fortalecimiento de los servicios de salud que se prestan en el país. La medida regula la telesalud.

Según el ministro de Salud, Fernando Ruiz Gómez, la regulación de la telemedicina tiene un doble efecto benéfico para el control de la pandemia_ “Por un lado ayuda a que las personas que tienen riesgo importante como mayores de 70 años no tengan que recurrir a servicios en hospitales y por otro lado, protege a los trabajadores de la salud en el sentido en que se genera una menor exposición a personas posiblemente contagiadas por COVID-19”.

Esteban Granada Aguirre, director de Telesalud, afirma que se han obtenido resultados satisfactorios con esta metodología. “El programa cuenta con capacidad tecnológica y humana para la atención de hasta 50.000 usuarios en línea a través de la plataforma web www.coronavirustelesalud.com”. 

Procesar muestras desde la región

Según el Instituto Nacional de Salud (INS), en Caldas hay 91 casos positivos de COVID-19, tres fallecidos a causa del brote y 33 personas recuperadas. En el país, 53 laboratorios están habilitados para el procesamiento y diagnóstico. Para el caso específico del departamento caldense, el único autorizado para la realización de muestras es el Laboratorio de Biología Molecular de la Universidad de Caldas. 

El Instituto Nacional de Salud (INS), a través de la Dirección Territorial de Salud de Caldas, validó todos los requerimientos necesarios para habilitar el análisis de las muestras y así dar luz verde al procesamiento de las pruebas desde el pasado 23 de abril. “Con el laboratorio acortamos el tiempo de diagnóstico para tener un panorama a tiempo del número de casos infectados porque si esperamos resultados del INS podrá tardar hasta ocho días”, expresó Mónica Alexandra Díaz Sánchez, epidemióloga y coordinadora del proyecto. 

Según Ceballos Márquez, el laboratorio está en capacidad de realizar 90 pruebas diarias con turnos de 24 horas de funcionamiento del laboratorio. Sin embargo, por falta de reactivos, no se ha iniciado el análisis de las muestras. A esto, la directora de la Dirección Territorial de Salud de Caldas, Jimena Aristizabal López, afirmó que ya llegaron 11.000 kits de extracción de reactivos pero hace falta uno complementario para realizar los tres controles necesarios a la prueba y así garantizar el resultado. 

Protección para los profesionales de salud 

La iniciativa, que ya donó 200 máscaras a la Dirección Territorial de Salud de Caldas y que espera alcanzar una producción de 5.000, logró en un primer momento el diseño de un prototipo que fue validado en espacios de simulación real y en momentos de emergencia crítica. “La máscara lograda garantiza la seguridad del profesional de salud al minimizar el contacto con agentes infecciosos”, dijo Henry Hernández, enfermero de la UCI del Hospital Santa Sofía. 

La producción se pone en marcha a través de la impresión 3D de los visores. Además, el equipo de Actívate puso a disposición los distintos archivos STL del prototipo que son de código abierto y están disponibles para que cualquier persona haga uso de ellos. Otras instituciones como la Universidad EIA de Antioquia, la Pedagógica, la Tecnológica de Colombia (UTPC) y la EAN también han contribuido a la pandemia con máscaras para donar a médicos y enfermeros que trabajan durante la contingencia. 

* Equipo de apropiación social del conocimiento de la Universidad de Caldas

* Estamos cubriendo de manera responsable esta pandemia, parte de eso es dejar sin restricción todos los contenidos sobre el tema que puedes consultar en el especial sobre Coronavirus

Apóyanos con tu suscripción

Por Juana Valentina Bustos*

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar