Al menos 1.277 victimizaciones, de las cuales 497 corresponden a pérdida de vidas, se presentaron en Colombia durante 2023 como consecuencia de violaciones a los derechos humanos y hechos de violencia política. Así lo expusieron el Centro de Investigación y Educación Popular (CINEP) y la oenegé Colombia Diversa en la más reciente edición de la revista Noche y Niebla, que le hace seguimiento al panorama de violencia en el país.
“No nos gusta mucho insistir en los números pero, de todas formas, que la cifra de vidas destruidas esté alrededor del medio millar es muy alta. De ellos, 111 eran líderes sociales de base, así que no se trata solo de eliminar a una personas, sino a un proyecto social, una reivindicación, un movimiento por los derechos de los grupos más humildes”, le dijo a Colombia+20 el sacerdote Javier Giraldo, investigador del CINEP.
Subió la violencia contra la población LGBTIQ+
Una de las principales alertas del documento es el incremento del 12% en los asesinatos de personas con liderazgo social pertenecientes a la población LGBTIQ+ durante el año pasado (fueron 10 de los 111 homicidios a líderes documentados).
“Llama la atención que los defensores LGBTIQ+ comiencen a aparecer en las cifras. Hay que anotar que muchas veces no son percibidos como legítimos en su defensa, al contrario, se ven como una amenaza moral, a la nación o a la familia, y no se ve como legítima la defensa de la igualdad de las personas LGBTIQ+. Todo eso hace que puedan ser más vulnerables y que tengan incluso menos respaldo social en sus comunidades”, dijo Marcela Sánchez Buitrago directora de Colombia Diversa.
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También se encendieron las alarmas por la situación del Cauca, que concentra el 28,7% de todos los casos de violencia registrados a nivel nacional. En otras palabras, solo en uno de los 32 departamentos del país se concentra más de un cuarto del total de los hechos.
Noche y Niebla registró 1.207 casos de violencia
La reciente edición de la revista asegura que en 2023, como consecuencia de violaciones de derechos humanos al menos 457 personas recibieron amenazas; 169 sufrieron lesiones físicas, 29 fueron torturadas; 27 fueron desaparecidas forzosamente y ese mismo número recibió atentados. En cuanto a las 471 personas perdieron que fueron asesinados, el informe indica que corresponden a diferentes formas de violencia, incluyendo ejecuciones extrajudiciales, homicidios intencionales y asesinatos por motivos políticos o de intolerancia social.
De los 1.207 casos, 446 corresponden a violaciones de derechos humanos, cuyos principales responsables serían grupos de corte paramilitar (370 hechos), miembros de la Policía (39) y tropas del Ejército (34).
Respecto a las 201 a victimizaciones de Derecho Internacional Humanitario Consuetudinario, se estima que 125 fueron perpetrados por grupos de corte guerrillero, 41 por miembros del ELN y 30 más por combatientes.
En cuanto a los casos de violencia político social, se registraron 630 (en estos no hay presunto responsable claramente definido).