:format(jpeg)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elespectador/NJ3Q3ZVDZZAGNAPR3AE4UEIPRY.jpg)
La tarde del 9 de abril, cuando terminaban los actos de conmemoración del Día Nacional de las Víctimas del conflicto armado, al mismo tiempo era capturado por la Fiscalía General de la Nación y miembros de la inteligencia norteamericana, Seusis Pausivas Hernández Solarte, hasta hace apenas un año miembro del Estado Mayor Central de las Farc, también conocido como Jesús Santrich.
Tras la dejación de las armas, fue el vocero de la exguerrilla en la Comisión de Impulso y Verificación a la Implementación del Acuerdo (Csivi) y en septiembre de 2017 sacó la tercera votación en el congreso del partido Farc con 835 votos. A finales del año pasado su colectividad lo designó para ocupar una de las cinco curules en la Cámara de Representantes, como se acordó en La Habana.
Lea también: La revisión que hará la JEP a la solicitud de extradición de "Jesús Santrich"
Sigue a El Espectador en WhatsAppLa acción judicial contra Santrich, con circular roja a bordo y el riesgo latente de la extradición a los Estados Unidos, por el delito de tráfico o porte de estupefacientes, generó revuelo en diferentes sectores sociales y políticos del país, y mucha incertidumbre entre los miembros del ahora partido político Farc, las víctimas y quienes han apoyado el proceso de paz. Para nadie es un secreto que este es un golpe al corazón del acuerdo y que traerá sus consecuencias. Estos son algunos de los impactos más claros:
Lea también: ¿Quién es Jesús Santrich, el exguerrillero detenido por la Fiscalía?