A la cárcel exreina vinculada con red de proxenetismo en Cartagena
La Fiscalía le imputó los delitos de proxenetismo con menor de edad e inducción a la prostitución agravada.
El Espectador
Un juez de control de garantías de Cartagena cobijó con medida de aseguramiento en centro carcelario a Kelly Johana Suárez Moya, excandidata al reinado popular por el barrio Obrero de la capital de Bolívar en el 2013, vinculada por la Fiscalía General en una red de proxenetismo que fue desarticulada por las autoridades el pasado sábado.
En la decisión el funcionario judicial ordenó la reclusión de Suárez Moya en la cárcel de mujeres de San Diego en Cartagena. Igualmente cobijó con medida privativa de la libertad a cuatro hombres, quienes según las autoridades hacían parte de esta red que conseguían a menores de edad de bajos recursos de diferentes barrios pobres para hacer fiestas y encuentros sexuales con extranjeros.
En la diligencia judicial, que se extendió por tres días, la Fiscalía General les imputó a los cinco capturados los delitos de proxenetismo con menor de edad e inducción a la prostitución agravada. En la audiencia se señaló que estas personas fueron capturadas en una fiesta que se estaba celebrando en la isla de Barú y en la cual fueron hallados 60 jóvenes, cuyas edades oscilaban entre los 13 y 17 años. (Ver Exreina de belleza, entre capturados por red de prostitución de menores en Cartagena)
El ente acusador determinó que por medio de las redes sociales se habían hecho los contactos y las invitaciones para el encuentro por medio de una agencia de modelaje que tiene una sede en el sector de Bocagrande. Los procesados no aceptaron su responsabilidad en los hechos narrados por el fiscal del caso. (Ver Plantean alternativas de 'choque' para luchar contra explotación sexual infantil)
La Fiscalía indicó que cuenta con videos y grabaciones de audio, así como testimonios de menores de edad que fueron explotados sexualmente por esta red. Igualmente presentarán los elementos que fueron incautados en el operativo que tuvo la participación de agentes del CTI, la Armada Nacional, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar y autoridades estadounidenses.
Un juez de control de garantías de Cartagena cobijó con medida de aseguramiento en centro carcelario a Kelly Johana Suárez Moya, excandidata al reinado popular por el barrio Obrero de la capital de Bolívar en el 2013, vinculada por la Fiscalía General en una red de proxenetismo que fue desarticulada por las autoridades el pasado sábado.
En la decisión el funcionario judicial ordenó la reclusión de Suárez Moya en la cárcel de mujeres de San Diego en Cartagena. Igualmente cobijó con medida privativa de la libertad a cuatro hombres, quienes según las autoridades hacían parte de esta red que conseguían a menores de edad de bajos recursos de diferentes barrios pobres para hacer fiestas y encuentros sexuales con extranjeros.
En la diligencia judicial, que se extendió por tres días, la Fiscalía General les imputó a los cinco capturados los delitos de proxenetismo con menor de edad e inducción a la prostitución agravada. En la audiencia se señaló que estas personas fueron capturadas en una fiesta que se estaba celebrando en la isla de Barú y en la cual fueron hallados 60 jóvenes, cuyas edades oscilaban entre los 13 y 17 años. (Ver Exreina de belleza, entre capturados por red de prostitución de menores en Cartagena)
El ente acusador determinó que por medio de las redes sociales se habían hecho los contactos y las invitaciones para el encuentro por medio de una agencia de modelaje que tiene una sede en el sector de Bocagrande. Los procesados no aceptaron su responsabilidad en los hechos narrados por el fiscal del caso. (Ver Plantean alternativas de 'choque' para luchar contra explotación sexual infantil)
La Fiscalía indicó que cuenta con videos y grabaciones de audio, así como testimonios de menores de edad que fueron explotados sexualmente por esta red. Igualmente presentarán los elementos que fueron incautados en el operativo que tuvo la participación de agentes del CTI, la Armada Nacional, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar y autoridades estadounidenses.