Alerta de la Diócesis de Quibdó por ocupación del cementerio
La Diócesis señala que en los primeros días de junio ya se han realizado 70 inhumaciones. Se iniciará la construcción de 700 bóvedas.
La Diócesis de Quibdó y la parroquia San Francisco de Asís informaron que, debido al alto número de homicidios y la llegada de la pandemia, el cementerio San José de Quibdó podría alcanzar su ocupación.
En el comunicado firmado por la parroquia y la Diócesis, quienes administran el cementerio, se revela que el promedio mensual de inhumaciones ha aumentado. En el año 2019 fue 40, pero en los primeros cinco meses de este año, el promedio mensual llegó a 50. En los primeros 15 días de junio ya se han realizado 70 inhumaciones. “Infortunadamente, tendríamos que contemplar la posibilidad de un escenario peor, si el aumento de los casos conserva el ritmo de crecimiento actual”, señalan en el comunicado.
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El cementerio San José es el único con carácter de legalidad en la ciudad y ha sido históricamente el lugar de reposo de los fallecidos en Quibdó. La Diócesis explica que presentó una propuesta para un nuevo cementerio que fue rechazada por la anterior administración municipal; aún así se han realizado las adecuaciones necesarias en el que ya existe, “para cumplir con el plan de manejo ambiental. También se han construido bóvedas con los criterios de las actuales normas técnicas”.
De acuerdo con el comunicado, en los últimos diez años la ciudad ha sufrido las consecuencias de la violencia que se refleja en las cifras de homicidios, posicionando a Quibdó en un nivel tres veces por encima del promedio nacional.
“A pesar de las diferentes iniciativas de las Diócesis de Quibdó y de otras expresiones ciudadanas, ha sido imposible recibir una respuesta seria de la institucionalidad con el objetivo de formular un plan estructural, articulado y sólido, que proyecte y concrete la disminución de este delito. Según cifras oficiales, en los últimos ocho años hubo 800 homicidios en la capital del departamento, y 70 en lo transcurrido de este año”, afirman en el comunicado.
La administración del cementerio ha realizado las alertas correspondientes y presentó un plan para responder a la emergencia. Dice la parroquia que “a través de diálogos con Codechocó, Alcaldía de Quibdó y Gobernación del Chocó, se ha llegado a la conclusión de la necesidad de construir colaborativamente 700 bóvedas para responder a la potencial demanda del segundo semestre de este año”. Para eso se llegó a un acuerdo en el que la parroquia Catedral San Francisco de Asís realizará la construcción de 200 bóvedas y las otras 500 estarán bajo la responsabilidad de la Alcaldía de Quibdó y la Gobernación del Chocó.
La construcción de las bóvedas que están bajo la responsabilidad de la Catedral, iniciará la tercera semana de junio. La institución manifiesta que es posible que las bóvedas actuales se agoten antes de la construcción de las nuevas, en ese caso la institucionalidad deberá tomar medidas de emergencia. La Diócesis invita a la ciudadanía a respetar las normas de bioseguridad para protegerse a sí mismos y a los demás.
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La Diócesis de Quibdó y la parroquia San Francisco de Asís informaron que, debido al alto número de homicidios y la llegada de la pandemia, el cementerio San José de Quibdó podría alcanzar su ocupación.
En el comunicado firmado por la parroquia y la Diócesis, quienes administran el cementerio, se revela que el promedio mensual de inhumaciones ha aumentado. En el año 2019 fue 40, pero en los primeros cinco meses de este año, el promedio mensual llegó a 50. En los primeros 15 días de junio ya se han realizado 70 inhumaciones. “Infortunadamente, tendríamos que contemplar la posibilidad de un escenario peor, si el aumento de los casos conserva el ritmo de crecimiento actual”, señalan en el comunicado.
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El cementerio San José es el único con carácter de legalidad en la ciudad y ha sido históricamente el lugar de reposo de los fallecidos en Quibdó. La Diócesis explica que presentó una propuesta para un nuevo cementerio que fue rechazada por la anterior administración municipal; aún así se han realizado las adecuaciones necesarias en el que ya existe, “para cumplir con el plan de manejo ambiental. También se han construido bóvedas con los criterios de las actuales normas técnicas”.
De acuerdo con el comunicado, en los últimos diez años la ciudad ha sufrido las consecuencias de la violencia que se refleja en las cifras de homicidios, posicionando a Quibdó en un nivel tres veces por encima del promedio nacional.
“A pesar de las diferentes iniciativas de las Diócesis de Quibdó y de otras expresiones ciudadanas, ha sido imposible recibir una respuesta seria de la institucionalidad con el objetivo de formular un plan estructural, articulado y sólido, que proyecte y concrete la disminución de este delito. Según cifras oficiales, en los últimos ocho años hubo 800 homicidios en la capital del departamento, y 70 en lo transcurrido de este año”, afirman en el comunicado.
La administración del cementerio ha realizado las alertas correspondientes y presentó un plan para responder a la emergencia. Dice la parroquia que “a través de diálogos con Codechocó, Alcaldía de Quibdó y Gobernación del Chocó, se ha llegado a la conclusión de la necesidad de construir colaborativamente 700 bóvedas para responder a la potencial demanda del segundo semestre de este año”. Para eso se llegó a un acuerdo en el que la parroquia Catedral San Francisco de Asís realizará la construcción de 200 bóvedas y las otras 500 estarán bajo la responsabilidad de la Alcaldía de Quibdó y la Gobernación del Chocó.
La construcción de las bóvedas que están bajo la responsabilidad de la Catedral, iniciará la tercera semana de junio. La institución manifiesta que es posible que las bóvedas actuales se agoten antes de la construcción de las nuevas, en ese caso la institucionalidad deberá tomar medidas de emergencia. La Diócesis invita a la ciudadanía a respetar las normas de bioseguridad para protegerse a sí mismos y a los demás.
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