Luego que el padre del alcalde del municipio de El Carmen, en Norte de Santander, fue secuestrado en una finca de su propiedad en el corregimiento de Guamalito, los habitantes de esa localidad situada en la convulsa región del Catatumbo –donde hacen presencia grupos guerrilleros como Eln y Epl y bandas criminales– también reaccionaron y este domingo salieron a las calles a marchar con camisetas blancas como símbolo de paz. (Lea: Secuestran al padre del alcalde de El Carmen, en Norte de Santander)
Unas 400 personas con sombrilla en mano ante el fuerte aguacero que cayó sobre la región exigieron la liberación de Cristo Humberto Contreras Uribe, de 67 años, plagiado el pasado jueves 16 de febrero. (Lea: Eln detrás del secuestro del padre del alcalde de El Carmen, en Norte de Santander)
Mientras se preparaba la marcha, María Angélica Contreras, hija de la víctima, publicaba desde los Estados Unidos un video en que le visiblemente afligida pide a los plagiados el respeto a la vida de su padre. “Que tengan en consideración que es un hombre ya mayor que requiere cuidados especiales de salud”, dijo.
Recordó que su progenitor tiene problemas de corazón y diabetes. Con voz entrecortada les dijo a los secuestradores que “de todo corazón y en el amor de cristo yo los perdono” y los calificó de ser el resultado de una sociedad en crisis.
Pidió además que si es el Eln o cualquier otro grupo armado ilegal el que tiene a su padre que lo reconozcan y lo liberen: “Cuiden de mi padre y entréguenlo sano y salvo”.
Los mensajes de apoyo de la población carmelitana estuvieron acompañados por el defensor regional del pueblo Nelson Arévalo Carrascal, quien se unió al llamado por el pronto regreso a la libertad de Cristo Humberto Contreras Uribe.
Entre tanto, el alcalde Edwin Contreras Chinchilla y también hijo del plagiado les pidió a quienes tienen a su padre suministrar los medicamentos que requiere para mantenerse vivo. Al término de la movilización, la comunidad de El Carmen quedó a la espera de una reacción positiva por parte del grupo que tiene en su poder al adulto mayor.