Los delitos sexuales por los que fue capturado Assi Mosh

Hace casi un año, las autoridades le dieron un gran golpe al proxenetismo y a los delincuentes sexuales en Cartagena. Esas pesquisas se cobijaron bajo el nombre de Operación Vesta y se concentraron en cuatro líneas de investigación: la Torre del Reloj, alias La “Madame”, el excapitán de la Armada Raúl Romero y las casas VIP. Como resultado de la primera fase del operativo, el pasado 28 de julio fueron capturadas 18 personas, entre ellas varios ciudadanos israelitas enviados a la cárcel de Ternera. (¿Por qué es procesado Liad Tsurkel, israelita que generó polémica en Cartagena?)

Los extranjeros fueron privados de su libertad mientras avanza el proceso penal que, según la Fiscalía, se inició por el descubrimiento de una red de proxenetismo que lideraban desde la Casa Benjamín, ubicada en el exclusivo sector del Laguito. Casas VIP es la línea de investigación en la que las autoridades recopilaron evidencias para demostrar que en ese lugar se explotaba sexualmente a mujeres y, sobre todo a menores de 14 años. Las indagaciones comenzaron a partir de seguimientos y averiguaciones que agentes hicieron en el vecindario, porque era un secreto a voces de lo que se vivía en el sector. (Lea aquí: La empresa fachada que une a la "Madame", una exreina e israelíes)

“Algunos israelitas prostituyen y ejercen comercio sexual en nuestro país con algunas mujeres colombianas y venezolanas. Se tiene información de que se usan menores de edad para la explotación sexual”, aseguró el ente acusador. Así entonces fueron capturados seis presuntos integrantes de la estructura, entre colombianos y extranjeros: Liad y Samu, israelíes y presuntos líderes del concierto para delinquir y los delitos contra la libertad sexual; Margedis, Marcos y Giorgi, ciudadanos colombianos sindicados de cumplir funciones de proxenetas, intermediación y facilitación; e Iván, ciudadano venezolano. (Lea aquí: Capturan a Assi Mosh, el israelí buscado por promover la explotación sexual en Colombia)

Tambien se libró orden de captura contra Assi Mosh, pero su paradero era desconocido hasta la semana pasada cuando fue detenido en Lisboa (Portugal). El extranjero será procesado por los delitos de homicidio afravado, concierto para delinquir, enriquecimiento ilícito, turismo sexual e inducción a prostitución. Mosh había sido expulsado del país el 17 de noviembre de 2017, precisamente por estar relacionado con actividades de proxenetismo en Taganga (Santa Marta). Era considerado uno de los “intocables” de la región Caribe, pese a que era reconocido por sus negocios alrededor del turismo sexual.

Según la investigación, Assi Moosh era el líder de la organización que vendía paquetes turísticos que incluían alojamiento en Casa Benjamín, drogas y trabajadoras sexuales, varias de ellas menores de edad. La Fiscalía agrega en su expediente que las mujeres en Casa Benjamín eran maltratadas físicamente, que les suministraban drogas como forma de pago por los encuentros sexuales y que un testigo aseguró que la Policía llegó en una ocasión al lugar porque unos sujetos no querían pagarle a una prostituta y la emprendieron contra ella a golpes.

La presunta red de Casa Benjamín, además, arrendaba fincas en Turbaco, un municipio aledaño a Cartagena, en donde organizaba fiestas sexuales con transporte privado. También celebraba eventos en islas de la ciudad, a donde los participantes eran movilizados en lujosos yates. La Fiscalía agregó que tanto en las fiestas de Turbaco como en la portería de Casa Benjamín se vendían estupefacientes, incluso a personas que no ingresaban al hotel.

Hace casi un año, las autoridades le dieron un gran golpe al proxenetismo y a los delincuentes sexuales en Cartagena. Esas pesquisas se cobijaron bajo el nombre de Operación Vesta y se concentraron en cuatro líneas de investigación: la Torre del Reloj, alias La “Madame”, el excapitán de la Armada Raúl Romero y las casas VIP. Como resultado de la primera fase del operativo, el pasado 28 de julio fueron capturadas 18 personas, entre ellas varios ciudadanos israelitas enviados a la cárcel de Ternera. (¿Por qué es procesado Liad Tsurkel, israelita que generó polémica en Cartagena?)

Los extranjeros fueron privados de su libertad mientras avanza el proceso penal que, según la Fiscalía, se inició por el descubrimiento de una red de proxenetismo que lideraban desde la Casa Benjamín, ubicada en el exclusivo sector del Laguito. Casas VIP es la línea de investigación en la que las autoridades recopilaron evidencias para demostrar que en ese lugar se explotaba sexualmente a mujeres y, sobre todo a menores de 14 años. Las indagaciones comenzaron a partir de seguimientos y averiguaciones que agentes hicieron en el vecindario, porque era un secreto a voces de lo que se vivía en el sector. (Lea aquí: La empresa fachada que une a la "Madame", una exreina e israelíes)

“Algunos israelitas prostituyen y ejercen comercio sexual en nuestro país con algunas mujeres colombianas y venezolanas. Se tiene información de que se usan menores de edad para la explotación sexual”, aseguró el ente acusador. Así entonces fueron capturados seis presuntos integrantes de la estructura, entre colombianos y extranjeros: Liad y Samu, israelíes y presuntos líderes del concierto para delinquir y los delitos contra la libertad sexual; Margedis, Marcos y Giorgi, ciudadanos colombianos sindicados de cumplir funciones de proxenetas, intermediación y facilitación; e Iván, ciudadano venezolano. (Lea aquí: Capturan a Assi Mosh, el israelí buscado por promover la explotación sexual en Colombia)

Tambien se libró orden de captura contra Assi Mosh, pero su paradero era desconocido hasta la semana pasada cuando fue detenido en Lisboa (Portugal). El extranjero será procesado por los delitos de homicidio afravado, concierto para delinquir, enriquecimiento ilícito, turismo sexual e inducción a prostitución. Mosh había sido expulsado del país el 17 de noviembre de 2017, precisamente por estar relacionado con actividades de proxenetismo en Taganga (Santa Marta). Era considerado uno de los “intocables” de la región Caribe, pese a que era reconocido por sus negocios alrededor del turismo sexual.

Según la investigación, Assi Moosh era el líder de la organización que vendía paquetes turísticos que incluían alojamiento en Casa Benjamín, drogas y trabajadoras sexuales, varias de ellas menores de edad. La Fiscalía agrega en su expediente que las mujeres en Casa Benjamín eran maltratadas físicamente, que les suministraban drogas como forma de pago por los encuentros sexuales y que un testigo aseguró que la Policía llegó en una ocasión al lugar porque unos sujetos no querían pagarle a una prostituta y la emprendieron contra ella a golpes.

La presunta red de Casa Benjamín, además, arrendaba fincas en Turbaco, un municipio aledaño a Cartagena, en donde organizaba fiestas sexuales con transporte privado. También celebraba eventos en islas de la ciudad, a donde los participantes eran movilizados en lujosos yates. La Fiscalía agregó que tanto en las fiestas de Turbaco como en la portería de Casa Benjamín se vendían estupefacientes, incluso a personas que no ingresaban al hotel.