La Policía de Tránsito y Transporte Nacional decomisó una cava que contenía 33 tortugas desmembradas y 200 huevos, que eran transportadas en un bus de servicio intermunicipal, que cubría la ruta El Banco Magdalena - Bucaramanga. Los agentes en el puesto de control le solicitaron a un joven de 18 años abrir una de las cavas, donde encontraron las tortugas y sus huevos.
El material incautado fue entregado a la Corporación Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga (CDMB), quienes se encargaran de la desnaturalización o destino final de los animales.
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Por otro lado, el joven de 18 años fue puesto a disposición de la Fiscalía. “Con el fin de que todo el peso de la ley caiga sobre las personas depredadoras de fauna silvestre, la CDMB acompañó a la Policía de Tránsito a presentar ante la Fiscalía a un joven de 18 años al que se le decomisó un cargamento de tortugas hicoteas o galápagos desmembrados y sus respectivos huevos”, manifestó la Corporación Autónoma.
Este hecho ha generado indignación, especialmente, porque esta especie de tortugas está en vía de extinción, debido la desaparición de aproximadamente el 30% de su población en los últimos 20 años. Esto ha sido generado por los altos niveles de explotación y degradación de su hábitat.
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“Pese a los múltiples llamados de atención por diferentes canales de comunicación, aún continuamos recibiendo casos aterradores como este, insistimos en lo mismo; la fauna silvestre, se debe proteger y cuidar, cada especie juega un papel muy importante dentro de cada ecosistema al que pertenece, y en el caso de las tortugas hicoteas, estas deben permanecer en su hábitat, y por ninguna razón las debemos cazar ya sea como mascotas o cómo se presentó en este caso, para ser vendido como alimento”, sostuvo Diana Carolina Pérez, médica veterinaria de la CDMB.