La alcaldía de Medellín comenzó el año borrando murales y grafitis en puentes y espacios públicos de la ciudad, lo que ha desatado la indignación de colectivos artísticos que han pedido a la administración distrital detener este tipo de acciones. Pero hubo un caso particular con el mural que estaba pintado sobre la avenida Paralela, que en menos de una semana ha sido borrado dos veces; una de estas fue liderada por un concejal del Centro Democrático.
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Se trata de la frase “Nos están matando”, que fue pintada durante las manifestaciones en el país, en 2020, por lo que ha sido considerada como un símbolo de resistencia y memoria colectiva. Por ello, cuando la alcaldía pintó de gris la pared, por lo menos 80 artistas de diferentes colectivos se reunieron para volverla a recrear.
“No permitiremos que el gris del olvido intente borrar la fuerza y el mensaje de esta obra. ‘Nos Están Matando’ regresa a los muros no como un simple acto de restauración, sino como una reafirmación de nuestra resistencia y compromiso con la libertad creativa”, indicó en ese momento, en un comunicado, el colectivo Mesagraff que estuvo detrás de volver a pintar la frase.
La polémica se agrandó esta semana que el concejal Andrés Gury Rodríguez volvió a cubrir de gris el grafiti. Lo hizo público en un video en el que apareció con una mujer que asegura que es líder de del sector de Toscana y quien dice que: “Quiero un mural con mensajes positivos, flores, mariposas, letreros como que hagan elogio a la familia, animales en vía de extinción, tantas cosas positivas que podemos pintar en este mural”.
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En respuesta, en la noche del 9 de enero, alrededor de 100 artistas volvieron a intervenir el mural, esta vez para escribir la frase “El arte no se calla”. Sobre esto, nuevamente el colectivo se pronunció y señaló que “el arte es memoria, resistencia y libertad.
Sumado a esto, explicaron que pintaron los rostros de Pedro Nel Ospina, Débora Arango y Jaime Garzón. “Le pedimos a los líderes políticos del país, de todas las corrientes, que no intenten instrumentalizar o capitalizar políticamente esta acción. No les pertenece, ni a ustedes, ni a sus movimientos y activistas asociados; le pertenece a la ciudadanía, a los artistas, a los colectivos, a los escritores de graffiti y a las escuelas de arte urbano”, dice el comunicado.
Ante esto, el cabildante calificó la intervención como vandalismo, según él, porque para intervenir el muro se requieren del permiso de la alcaldía de Medellín, por lo que pidió respuestas a la Secretaría de Seguridad. “Según el acuerdo 10 de 2020, para pintar ese muro necesitan permiso y autorización de la administración. Nosotros lo dejamos limpio anoche como iniciativa propia. Le solicitamos a la Policía de Medellín que evite la vandalización del espacio público, es la norma”.
Hasta ahora, la alcaldía no se ha pronunciado al respecto.