Tuverion que pasar 10 meses desde de la muerte de Carlos Mario Ramírez Ochoa para que su cuerpo fuese encontrado en el interior de su propia vivienda en el barrio Palmas del Llano de Girardota, Antioquia.
El hombre de 57 años vivía en el cuarto piso de un edificio con su esposa, pero entro en una depresión luego de que ella murió hace aproximadamente dos años. Este hecho lo llevó a tener conflictos con las personas que lo rodeaban y aislarse.
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Algunos de sus hermanos viven en el mismo edificio, pero pensaron que se había mudado del sector, porque Carlos cerró un taller de herradura que tenía en la calle Los Ramírez y cortó los servicios públicos de su vivienda.
El hallazgo del cadáver se dio el miércoles 8 de noviembre, cuando un cuñado ingresó al apartamento para verificar que allí no se encontrara Carlos. Habitantes del sector cuentan que en la zona nunca se sintió olor a algún cuerpo en descomposición que los alertara.
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Los funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) que realizaron el levantamiento del cuerpo reportaron que este se encontraba prácticamente “momificado”. El cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para determinar las causas del deceso, mientras que las autoridades indagan las razones por las que la familia no buscó al hombre.