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Una jornada de intenso dolor vivió la comunidad indígena de Murrí Pantano, en Frontino (Antioquia), luego de que en la tarde de este martes 10 de marzo, dos menores de 12 y 17 años murieran tras pisar una mina antipersonal, presuntamente instalada por miembros del Eln.
La Organización Indígena de Antioquia repudió los hechos y manifestó mediante un comunicado que los niños estaban de camino a realizar actividades de minería artesanal cuando ocurrió la tragedia. Minutos después, fueron atendidos por miembros de la Guardia Indígena, quienes los llevaron hasta un centro asistencial del municipio, donde fallecieron.
En los últimos cuatro meses han sido asesinados tres indígenas por estas mismas causas en la región. Por esto, le piden a las autoridades nacionales contemplar un eventual diálogo con el Eln para desescalar los niveles de violencia.
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Desde la comunidad también piden un mayor acompañamiento por parte de entidades internacionales para brindar garantías de seguridad con mayor veeduría.
Frontino, junto con Mutatá, Dabeiba y Segovia, forma el Cordón del Oro en Antioquia, una subregión apetecida por los grupos armados para incursionar en economías ilegales y mantener el control sobre los flujos territoriales en materia de narcotráfico y delitos conexos.