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'Subasta de Vírgenes': nueva modalidad de tráfico de personas en Medellín

El Concejo de Medellín afirma que en la ciudad se están subastando menores de edad vírgenes, particularmente en los barrios marginales. La entidad denuncia que además el tráfico de personas en Antioquia es un tema serio, un "secreto a gritos, secreto a voces".

El Espectador
09 de julio de 2008 - 02:43 p. m.

Hace varios meses, el presidente del Concejo, Federico Gutiérrez, comenzó una investigación sobre el tráfico de personas para posteriormente realizar un debate con sus colegas en Medellín. Días antes de concluirlo, llegó a sus manos una nueva denuncia sobre lo que él denominó "subasta de vírgenes".

Niñas y niños entre 10 y 12 años estarían siendo vendidos por sus familiares a adultos con alto poder adquisitivo, a cambio de la garantía de la virginidad de los pequeños. Gutiérrez no tiene pruebas concretas de la nueva modalidad de tráfico, sino que basó su denuncia en los comentarios de varios líderes de la comunidad paisa que le hablaban sobre niños y niñas que estarían llevando sus padres a moteles para que pasaran una noche o varios días con adultos a cambio de dinero.

"En Medellín y en el país el tráfico de personas es un secreto a gritos, secreto a voces. Colombia está en tercer lugar a nivel mundial en tráfico de personas, pero no sólo debemos fijarnos en lo que pasa hacia el exterior, porque internamente también se evidencia muchísimo esta problemática", alertó el concejal. En Medellín sólo se ha realizado una denuncia por tráfico de personas en lo que va del 2008. "La gente tiene miedo de denunciar, por eso he pedido a la Alcaldía Municipal y a la Policía que investiguen".

En la Terminal de Transportes de Medellín existe un grupo llamado "Los Ganaderos", que serían los encargados de traficar con mujeres al interior de Antioquia y hacia otros municipios. "Las niñas llegan con contactos a un espacio determinado de la terminal, se encuentran con una persona, luego les compran el tiquete y llegan hasta los pueblos, sobre todo cuando hay fiestas, y allí otra persona se encarga de ponerlas en contacto con quien ha pagado por ellas", indicó el concejal con respecto al tráfico de personas en general desde la terminal. Entre 1.000 y 1.500 personas semanalmente saldrían de la terminal con fines sexuales, muchas de ellas por amenazas o por presiones de familiares.

"A nosotros no se nos puede volver este tema como algo normal", advirtió el presidente del Concejo.

Por su parte, la Secretaría de la Mujer de la ciudad, en voz de Rocío Pineda, afirmó que "la policía no ha podido encontrar hechos concretos" sobre la llamada 'subasta de las vírgenes', pero que están trabajando para que las personas afectadas denuncien y así llegar a los culpables.

Por El Espectador

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