Según la empresa de datos globales Kantar y el modelo Brand Asset Valuator, Alpina se mantiene como la marca número uno de alimentos en el corazón de los colombianos. En sus 78 años de operación, sus productos se han consolidado como parte indispensable en la canasta familiar de cientos de hogares.
Entre los atributos medidos en el estudio se resaltó que la marca sabe cómo comunicarse con el público y tiene un impacto positivo en la sociedad por su trabajo en sostenibilidad y construcción de un mejor país. Sin embargo, no es el único aspecto en el que se destaca la empresa. Recientemente, también fueron reconocidos como la compañía más innovadora por la Asociación Nacional de Industriales (ANDI).
Por ello hablamos con Cristina de la Vega, directora ejecutiva de Alpina, para conocer cómo esta compañía 100 % colombiana le apuesta a llevar productos nutritivos de alta calidad a los hogares del país, mientras trabaja para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
¿Cómo reciben estos reconocimientos?
Nos llenan de orgullo y profundo agradecimiento con los colombianos porque fueron ellos los que nos eligieron. Los recibimos como un enorme compromiso para seguir trabajando y estar cerca de nuestros consumidores, brindándoles alternativas y entendiendo sus necesidades y gustos. Nuestro empeño es y seguirá siendo trabajar por Colombia y aportar con lo que hacemos. Actualmente, llevamos nutrición al 97 % del territorio nacional, aportando en doble vía: llevando productos y recogiendo leche, mientras apoyamos a los pequeños y medianos productores.
¿Cómo ha sido el trabajo articulado con los ganaderos?
Acopiamos leche a lo largo de Colombia, entendiendo las diferentes características que tienen los ganaderos en el país. De la mano de aliados hemos buscado apalancar el desarrollo de modelos asociativos en los que participan pequeños productores rurales con el propósito de generar un encadenamiento productivo de ganaderos a mercados competitivos.
Por otro lado, nuestros proveedores nos brindan leche de la mejor calidad. Esto gracias a la asistencia técnica enfocada en productividad, costos, calidad y sostenibilidad que les brindamos y con la cual hemos logrado que sean 3.5 veces más productivos que el promedio nacional.
¿Qué aspectos influyen para que Alpina sea la marca más cercana?
Estamos en el corazón de los colombianos desde hace 78 años. Somos una marca de tradición; pero nos preocupamos por innovar y por eso ha sido reconocida desde hace décadas por su calidad y sabor. La gente lo sabe porque se siente en los productos. Con todos nuestros “alpinistas” (colaboradores de la empresa) trabajamos de forma consciente para que los productos cumplan altos estándares y sean ricos para niños, jóvenes y adultos.
Hace poco recibieron un reconocimiento de la ANDI como la empresa más innovadora en el sector de alimentos. ¿Cómo lo han logrado?
Como compañía, tenemos una certeza y es que la innovación no la logramos solos. Por eso, contamos con una plataforma de trabajo colaborativo, en la cual, a través de conversaciones permanentes con nuestros consumidores, universidades, entidades científicas y especialistas en nutrición, conversamos constantemente sobre los valores nutricionales de los productos, las formas de llegar al mercado y las expectativas de los consumidores.
Con el paso de los años, el mercado ha venido cambiando y se ha agudizado la conciencia sobre qué se consume y en qué proporciones. ¿Cómo han logrado estar a la vanguardia del mercado?
Buscamos alternativas para satisfacer las necesidades, que son cambiantes como lo mencionas. Nos adaptamos a ellas y al mercado porque siempre nos proyectamos para seguir creciendo. Eso nos ha llevado a crear las diferentes líneas como Finesse y Yox con Defensis, pues las personas son cada vez más cuidadosas en su alimentación y como marca contribuimos a una nutrición más sostenible. Nos hemos propuesto llevar nutrientes a cada rincón de Colombia y seguiremos trabajando para ello.
En su estrategia de marca han enfatizado en la sostenibilidad, ¿cómo van con eso?
Para nosotros lo más importante es llevar nutrición, pero también tenemos un propósito claro y es hacerlo a través de la sostenibilidad. No podemos hablar de la una sin la otra, por eso trabajamos desde 18 frentes buscando mejorar nuestros procesos y siendo responsables de los costos medioambientales de la producción.
El año pasado logramos dos hitos relevantes: ser plástico neutro; es decir, recuperamos la misma cantidad de plástico que ponemos en el mercado, y ser carbono neutro, compensando y reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero en nuestras operaciones.
En los últimos 10 años, disminuimos la emisión de CO2 y, además, generamos un sistema de control de información y gestión de la huella de carbono. Todo esto porque somos una marca que busca, desde el aprendizaje continuo y el trabajo constante, ir más allá.