Este miércoles, el Partido FARC, aunque se ha unido a propuestas parlamentarias, puso sobre la mesa un paquete de plan de acción en torno a la situación que generó el brote del coronavirus en el país a título personal. Son en total nueve medidas que piden ponerse a consideración y que, a su juicio, ayudarán en la redefinición del modelo económico actual y del sistema de protección social.
En ese orden de ideas, la primera propuesta fue en orden sanitario: “el fortalecimiento extraordinario de la infraestructura y dotación hospitalaria, incluida la provisión gratuita de medicinas”.
Le siguen las medidas de corte económico, como la protección del empleo y esto, según explica el partido, se logra a través de subsidios del Estado las nóminas, dándole prioridad a las medianas y pequeñas empresas. “Se deben de eliminar todas las formas jurídicas que puedan autorizar la suspensión o terminación de las relaciones laborales”.
Y a quienes la crisis los tomó sin empleo o en la informalidad, la colectividad pide para que haya un subsidio especial para estas formas, a través de un ingreso básico. Suman a beneficiarios de esta ayuda económica a quienes se dedican al cuidado del hogar, población discapacitada, mujeres cabeza de hogar y adultos mayores. “En todos los casos calculado como un monto igual situado en un nivel que supere al menos la pobreza monetaria”.
Pese a que se pida buscar los mecanismos jurídicos que no permitan la cesación de las relaciones laborales, también pidieron que los servicios sean gratuitos, incluyendo lo que tienen que ver con el acceso a internet, ya que se ha multiplicado el trabajo desde las casas y la gente requiere de buena conexión.
Además de esto, piden la moratoria de los créditos hipotecarios, de consumo y educativos por un lapso de tres meses y luego se reprogramen y redefinan los plazos y las cuotas. También, pide el partido, se necesita “el subsidio de los pagos de pensión y matrícula en los centros educativos privados, educación básica, media y superior”.
Continuando con las medidas económicas, le hace un llamado para que se “intervenga el mercado financiero para regular las tasas de interés en niveles que no superen en más de seis puntos anuales la tasa de inflación” y pide por la regulación de los precios en los mercados para acabar con la especulación.
“Los estímulos extraordinarios a la producción y comercialización, incluido el transporte, de la producción campesina de alimentos, la habilitación de un sistema de compras del Estado y la creación de bancos de alimentos”, complementan el punto anterior. Y por última, una medida tributaria, en cuanto a que se aplacen los pagos de los impuestos.
“Estas medidas urgentes deben llevar a pensar en una redefinición estructural de mediano y largo plazo de la orientación del modelo económico, del sistema de protección social y, sobre todo, a la consideración de una universalización progresiva de un ingreso mínimo vital y móvil, en especie y monetario, con posterioridad al plan de choque”, se explica sobre las propuestas.
Esto, así mismo, para ellos, encamina a que el sistema productivo no se base exclusivamente en generar ganancias, sino “en la eliminación de las condiciones de injusticia e inequidad. Y la política fiscal y monetaria, moviéndose en el marco del orden constitucional vigente, ofrece numerosas posibilidades para ellos, que hoy poseen plena vigencia y debe de ser consideras”.
Más allá de presentar este plan de acción, la FARC insiste que las medidas deben de tomarse en concordancia con los gobiernos locales y contar con el compromiso del sector financiero y empresarial, “más allá de los gestos y acciones meramente caritativas”.
“Las necesidades existenciales de la mayoría de la población no se solucionan con dádivas, sino con políticas sociales estructurales. Además de superar la pandemia, si se trata de salvar la economía, debe de considerar que ese propósito es imposible si no se salva a la clase trabajadora”, finaliza el comunicado.