
Piel de porcelana a los 30 con estos simples cuidados y mascarillas
La llegada de los 30 años supone para muchos un momento de cambio de vida y sobre todo estragos en nuestra piel, con algunos pasos puedes tener una piel de porcelana a los 30 años. La dermatóloga de la Universidad de São Paulo y directora Científica de la Unidad Láser y Piel, Yudy Pinzón nos cuenta qué recomendaciones debemos tener en cuenta para cuidar nuestra piel en el momento que llegamos al tercer piso.
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¿Qué pasa con la piel al llegar a los 30 años?
A los 30 años la piel ya empieza a tener esos primeros cambios y comienza la disminución no solo del ácido hialurónico que es el responsable de la hidratación de la piel, sino también el colágeno que otorga flexibilidad y soporte a esta.
Es muy probable que la piel ya no se vea tan luminosa o hidratada. En este sentido, es común que se requiera cambiar las hidratantes o humectantes suaves, por otros con principios activos que empiecen a recuperar y anti oxidar la piel. Igualmente, las grasas buenas de la piel se alteran continuamente y necesitamos ceramidas que nos ayuden a protegerla.
¿Qué cremas usar a los 30 años?
Con estos productos activos se crea una película que impide que la piel se deshidrate, y a su vez, la nutre, conserva su grasa y evita la oxidación de la piel. Esto se complementa con suplementos que contienen colágeno, aminoácidos y silicio orgánico que nos van a permitir conservar la estructura de la piel.
¿Cómo rejuvenecer la piel a los 30?
Como se ha mencionado, el cuidado de la piel debe empezar a temprana edad, pues de esto depende que a medida que pasan los años la piel mantenga su firmeza y luminosidad por más tiempo (Puedes leer: cómo cuidar tu piel a los 20 años). Es esencial no abusar de este órgano tan importante y no exponerlo a factores externos como el sol de manera constante, por lo que es esencial el uso del protector solar.
El cuidado de la piel a los 30 años debe ser estricto, pues la piel ya no es la misma que a los 20 años.
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¿Qué sérum o sueros faciales debo usar a los 30 años?
Es común llegar a los 30 años y preguntarse si se debe usar una crema antienvejecimiento e incluso si es hora de comenzar a realizarse tratamientos médico-estéticos. La respuesta es sí, no solo es importante, sino necesario. Las cremas hidratantes previenen la pérdida de agua, sin embargo, es necesario empezar a utilizar productos con principios activos y nutritivos, como el sérum. Los Sérums o sueros faciales son ideales para prevenir el envejecimiento, pues gracias a sus componentes activos, la piel lucirá más luminosa y ayudará a reparar el daño en la piel.
Los sueros faciales tienen diferentes vehículos, por ejemplo, si la piel tiene una tendencia grasosa, es preferible el uso de sérum con un vehículo acuoso, mientras que, si la piel tiene una tendencia seca, se opta por un vehículo más aceitoso. La diferencia también radica en el principio activo que van a actuar, específicamente para lo que el especialista haya determinado que necesita la piel del paciente. Por ejemplo, la piel puede necesitar antioxidantes, despigmentantes u otro tipo de sustancias concentradas que penetran la dermis.
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Además de los sérums, también se puede iniciar con tratamientos médico-estéticos como: peelings, luz pulsada, mesoterapia o toxina botulínica. Cada uno de estos, siempre bajo la prescripción de un profesional especialista.
Mascarillas para cuidar tu piel
Mascarilla de rosas para la piel:
Tritura 5 pétalos de rosas en un recipiente hasta que se vuelva una pasta, utiliza un mortero de madera o porcelana para hacer ese proceso. Con las manos limpias toma la pasta y llévala a todo el rostro y cúbrelo. Deja actuar la mascarilla en el rostro durante 15 a 20 minutos y retirala preferiblemente con agua tibia. Este tipo de mascarillas sirve para quitar las manchas y suavizar la piel.
Mascarilla para exfoliar la piel
El azúcar es un exfoliante para nuestra piel porque ayuda a limpiar los poros y retirar todo lo que tenemos dañado, recuerda que el azúcar lo puedes aplicar en cualquier tipo de piel. Lo primero que tienes que hacer es tomar un recipiente y mezclar azúcar y miel, con tus dedos toma un poco de la mezcla y aplica en tu rostro en forma circular utilizando las yemas de tus dedos, déjala actuar en tu rostro entre 15 a 20 minutos y retirar con abundante agua fría.
También puedes hacer otra mascarilla con este mismo procedimiento pero utilizando avena y miel. La avena ayuda a exfoliar e hidratar tu piel por eso es muy recomendada para todos los rostros. Otra de las recomendaciones es que si vas a utilizar la miel la utilices en pieles secas y no en las grasosas.
Mascarilla con Yogurt
Las mascarillas de yogurt ayudan a suavizar la piel y hacerla ver cada vez más tersa y evita que te salgan más arrugas. Para hacerla puedes tomar cualquier yogurt y aplicarlo sobre la cara, lo puedes dejar entre 15 a 20 minutos y retira con abundante agua. También puedes utilizar yogures que tengan extracto de fruta porque ayudan a exfoliar la piel.
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Mascarilla de pepino
El pepino es una muy buena opción de mascarilla porque ayuda a hidratar la piel y sirve como desinflamatorio. Cortas en trozos el pepino y trituras en un mortero hasta que se extraiga un líquido, ese líquido es el que debes aplicar a tu rostro, déjalo actuar por 10 minutos y retiras con agua fría.
*Consejos de @YosoyEnriqueTrujillo

