Las relaciones sexuales son una experiencia natural y placentera, pero a veces el cuerpo puede enviar señales de que algo no está del todo bien.
Mientras que ciertos cambios son normales, otros podrían ser indicativos de problemas que necesitan atención médica.
Sigue a Cromos en WhatsAppRelaciones sexuales: 5 señales de alerta que podrían indicar un problema de salud
En este artículo, exploramos cinco cosas que nunca deben pasarse por alto después de tener sexo. Mantener la salud íntima es fundamental, y reconocer estas señales es el primer paso para cuidarte:
1. Sangrado inusual
Aunque un leve sangrado puede ser común en casos específicos, como la primera vez o después de relaciones particularmente intensas, un sangrado recurrente o excesivo no es normal. Puede estar relacionado con infecciones, lesiones en las paredes vaginales, pólipos o incluso condiciones más graves como problemas cervicales. Si ocurre con frecuencia, es importante consultar a un ginecólogo para descartar riesgos mayores.
2. Mal olor íntimo
La higiene personal es esencial, pero si después del sexo se detecta un mal olor persistente, podría ser señal de una infección como vaginosis bacteriana o tricomoniasis. Estas condiciones alteran el equilibrio natural de las bacterias en la zona íntima y requieren tratamiento médico. Nunca ignores esta señal, ya que podría agravarse con el tiempo.
3. Dolor persistente
Es normal sentir un leve malestar después de relaciones sexuales intensas, pero el dolor prolongado o constante no debería ignorarse. Este síntoma podría estar relacionado con infecciones, inflamación pélvica o condiciones como endometriosis. Escuchar al cuerpo y buscar orientación médica son pasos clave para proteger tu bienestar.
4. Comezón después del sexo
La comezón ocasional podría deberse a una alergia al látex o a productos como lubricantes, pero si la molestia persiste, podría tratarse de una infección por hongos o dermatitis de contacto. Evitar automedicarse y buscar una opinión profesional es esencial para encontrar la causa y el tratamiento adecuado.
5. Flujo anormal
El flujo vaginal es una forma de mantener la zona íntima saludable, pero si cambia drásticamente en color, textura o cantidad tras tener sexo, podría ser una señal de alerta. Infecciones como la candidiasis o enfermedades de transmisión sexual (ETS) son posibles causas. Mantener revisiones ginecológicas periódicas puede prevenir complicaciones.
Te puede interesar: 5 poses sexuales que ayudan a la mujer a llegar al orgasmo: es momento de innovar
Cabe recordar que el sexo es una parte importante de la vida, pero también lo es cuidar de tu salud íntima. Si detectas alguna de estas señales, no las ignores ni las normalices.
Escuchar a tu cuerpo y actuar a tiempo puede marcar la diferencia entre una molestia pasajera y un problema de salud grave. Al final del día, estar informado y cuidar de ti es el mayor acto de amor propio que puedes tener.
*Contenido generado con asistencia de la IA.
