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Lo que parecía ser otro día en la oficina, se convirtió en una tragedia para Deportivo Cali un 24 de octubre de 2002. A las 4:00 p.m. los azucareros arrancaron su entrenamiento y la tarde se tornó lluviosa en cuestión de segundos.
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De acuerdo con Francisco Henao Bolívar, periodista de El País de Cali, que había ido a hablar con Herman Gaviria, uno de los referentes del equipo, la práctica parecía estar ambientada por los “flashes” de una cámara fotográfica por la tormenta.
En medio de esas condiciones, un rayo impactó con un poste cercano y rebotó en la gramilla. Como consecuencia, varios jugadores del Cali se desplomaron y estuvieron varios minutos aturdidos. Poco a poco se fueron reincorporando uno por uno, pero hubo dos que no lo hicieron, ‘Carepa’ y Giovanni Córdoba.
Óscar Héctor Quintabani, entrenador del Cali en ese entonces, corrió junto con su cuerpo técnico a auxiliar a sus jugadores. Al ver el estado de ambos jugadores, y ante la demora que implicaba esperar una ambulancia, el equipo optó por trasladarlos a la Clínica Valle del Lili en su bus.
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El impacto fue fulminante para Gaviria, que al momento de su muerte tenía 32 años. Córdoba, de 24, fue trasladado a un hospital, pero falleció tres días más tarde como consecuencia del accidente. Los hinchas azucareros se agolparon en el centro de salud y corearon los nombres de los futbolistas en quizás la fecha más trágica de su historia.
Herman Gaviria, un referente del mediocampo noventero
Herman Gaviria nació en Carepa, un municipio del Urabá antioqueño, del que surgió su apodo. Debutó en 1990 en uno de los mejores Nacional de la historia. Francisco Maturana le dio confianza y Hernán Darío Gómez lo potenció para convertirse en uno de los mejores pivotes de la década. Con el cuadro verdolaga levantó dos campeonatos, uno en 1991 y el otro en 1994.
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Sus actuaciones con el verde paisa, donde fue referente, lo hicieron merecedor de un cupo en la selección de Colombia que disputó las eliminatorias rumbo al Mundial de Estados Unidos 1994. Al principio, era suplente de Gabriel Barrabás Gómez, pero tras una mezcla de amenazas y cuestiones de edad, Carepa tomó su lugar en la tricolor.
Carepa formó parte del decepcionante paso de la selección en dicha cita orbital. Fue suplente en la dolorosa derrota del debut contra Rumania (1-3) y titular en los otros dos encuentros. En el partido de cierre, contra Suiza, marcó uno de los goles que le dieron a Colombia su único triunfo del certamen.
Un año después, Gaviria fue clave en la Copa América 1995, en la que el combinado nacional alcanzó el tercer lugar. Volvió a tener protagonismo en 1997, en la cita continental que se disputó en Bolivia, donde la selección fue eliminada en los cuartos de final.
En 1998 dejó Nacional y fichó por Deportivo Cali. Allí estuvo bajo las órdenes de Reinaldo Rueda, José Cheché Hernández y Luis Fernando Suárez. Tuvo unos breves pasos por el Shonan Bellmare del fútbol japonés y Bucaramanga antes de regresar al conjunto azucarero con Quintabani al mando.
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El semestre en que ocurrió la tragedia. Carepa era pieza clave en un Cali que luchaba por el título. Era uno de los líderes del equipo, que finalizó el todos contra todos en el primer lugar. En los cuadrangulares, los azucareros no mantuvieron la regularidad y Medellín, eventual campeón, los dejó por fuera en los cuadrangulares.
El prematuro adiós de una promesa
Con menos reflectores que Carepa, Córdoba fue el otro protagonista de la tragedia. Surgió de la cantera del equipo azucarero y formó parte de la nómina que quedó subcampeona de la Copa Libertadores de 1999. Deportivo Cali tenía puestas en él grandes esperanzas.
El delantero vistió los colores del Cali durante seis temporadas y estuvo a préstamo una temporada en Liga de Quito de Ecuador. El año del accidente, Córdoba compartió ataque con Léider Preciado, que terminó el torneo como tercero en la tabla de goleadores.
Giovanni tenía un hermano que también fue futbolista, Hernán, quien también defendió los colores del cuadro azucarero, Córdoba, y Atlético Huila. En 2009 falleció en un accidente de tráfico en Rivera, Huila.
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