De Cortuluá al Inter de Palmira: nuevo episodio de clubes desaparecidos en Colombia

La temporada 2023 fue la última del Cortuluá en el fútbol colombiano. El onceno del corazón del Valle se cambió de nombre y resurgió como el Internacional Fútbol Club de Palmira, poniendo fin a 56 años de historia, de los cuales 32 fueron en el profesionalismo.

La temporada 2023 fue la última del Cortuluá en el fútbol colombiano. El onceno del corazón del Valle se cambió de nombre y resurgió como el Internacional Fútbol Club de Palmira, poniendo fin a 56 años de historia, de los cuales 32 fueron en el profesionalismo.

El conjunto tulueño no era un equipo con un fuerte poder de convocatoria y la mayor parte de su existencia la vivió en Segunda División. El 12 de Octubre, la que fue su casa, normalmente se llenaba cuando equipos como América y Cali iban a jugar allá.

Cortuluá desapareció pero su razón social y su ficha dentro del sistema de clubes profesionales de nuestro país se mantienen. La institución le pertenece al empresario Ignacio Martán, que logró un acuerdo con las autoridades de Palmira para trasladar allá al equipo.

Los traslados de clubes no son nada raro en el fútbol colombiano, en especial en el Torneo BetPlay. El caso más reciente tuvo lugar a mediados de 2023, cuando los dueños del Valledupar Fútbol Club decidieron mudarse para crear el Real Soacha, ya que no se sentían a gusto con el apoyo de las autoridades vallenatas.

Más deportes Valledupar, la última ciudad en quedarse sin fútbol profesional

Desde que Uniautónoma desapareció en 2015 —Orsomarso se quedó con su lugar— que un equipo que jugó en Primera División no le ponía fin a su existencia.

Los equipos desaparecidos

Por ejemplo, Real Cartagena, que podría parecer un club tradicional, llegó al profesionalismo en 1992 tras quedarse con la ficha del desaparecido Sporting de Barranquilla. Ese fue uno de los primeros traslados que ocurrieron en el ascenso.

Patriotas, que este año volvió a la A, también logró su debut en la Segunda División de esa manera. En 1996 adquirió el cupo que antes le perteneció a la Academia Sarmiento Lora (1998-2002), que a su vez fue el heredero del también extinto Alianza Llanos, de Villavicencio.

Le puede interesar: Las victorias de Acolfutpro, el sindicato de los futbolistas

Alianza Llanos no es el único equipo que ha tenido el departamento del Meta. En la actualidad Llaneros -que se hizo con la ficha que antes era de Academia Compensar- y antes existió Centauros, cuyo cupo pasó a Universitario de Popayan y desde 2019 le pertenece al Boca Juniors de Cali.

Municipios como Sincelejo, Yopal, Caucasia, Turbo o Chía también han tenido cuadros profesionales, pero por distintos factores, ya sea crisis económicas, diferencias con las sedes, acuerdos de sus dueños, tuvieron que mudarse a otras regiones.

Las dificultades de los nuevos

La aparición de nuevos equipos implica un reto para sus directivos, quienes no solo tienen que adaptarse a una nueva ciudad, sino que también les toca remar contra la corriente para consolidarse y, más allá de conseguir buenos resultados deportivos, sufren para ganar adeptos.

Águilas Doradas, por ejemplo, pese a haber cosechado logros en las últimas temporadas, ha tenido un crecimiento muy lento en Rionegro si hablamos en términos de hinchada. Las mudanzas no han ayudado en el proceso. Con tantos traslados dentro de Antioquia y alrededores, solo unos pocos simpatizantes han creado fidelidad con la institución.

Lo invitamos a leer: Los retiros que marcaron al mundo del fútbol en 2023

¿De qué depende que aparezcan nuevos equipos? La decisión es en su mayoría exclusiva de los dueños, pues más allá de la pertenencia que puedan desarrollar con algún lugar, lo cierto es que no dejan de ser empresas privadas. También influyen las facilidades que puedan tener en determinadas ciudades y la afinidad que haya con los inversores, ya sean otros privados o gobiernos locales.

Jaguares existe porque Sucre Fútbol Club, el anterior dueño de su ficha no pudo crear un proyecto viable y duradero, cosa que las autoridades de Córdoba sí pudieron hacer. El equipo ha crecido, ha mejorado sus instalaciones con el tiempo y ya va a completar 10 temporadas en la A.

Fortaleza llegó al fútbol profesional tras adquirir la ficha de un Atlético Juventud (Soacha) sumergido en deudas. Con el paso de los años se consolidó como una de las canteras más fuertes del país. Si no fuera por la crisis del extinto cuadro cundinamarqués, ese proyecto no habría sido posible.

Equipos colombianos desaparecidos en la última década:

🚴🏻⚽🏀 ¿Lo último en deportes?: Todo lo que debe saber del deporte mundial está en El Espectador