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El Real Madrid sufrió para empatar en el descuento 2-2 con el Sevilla en la jornada 35 del campeonato español, salvando un punto que no le vale para lograr el liderato, pero le mantiene la lucha por el campeonato.
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Fernando adelantó al Sevilla (22), Marco Asensio igualó (67), pero Ivan Rakitic puso de penal el 2-1 (78) y el brasileño Diego Carlos marcó en contra el 2-2 (90+3) al desviar un disparo de Toni Kroos, que mantiene las aspiraciones blancas al campeonato, después del duro golpe de su eliminación en semifinales de la Champions frente al Chelsea el miércoles.
“Perder dos puntos en el último minuto te deja una sensación de amargura”, consideró el técnico del Sevilla, Julen Lopetegui, tras el partido, añadiendo que “nos ha faltado un pelín de precisión para cerrar el partido, y al final contra el Real Madrid, si no lo cierras, te pasa esto”.
El empate permitió al Real Madrid recuperar la segunda posición liguera, a dos puntos del líder, el Atlético de Madrid, que la víspera había empatado 0-0 con el Barcelona, tercer clasificado, empatado a puntos con los merengues.
El equipo blanco dejó escapar la ocasión de ponerse líder a falta de tres jornadas para el final del campeonato español, frente a un Sevilla, cuarto clasificado, que mantiene también unas pequeñas esperanzas.
Pese a ello, Zidane considera que “la sensación es buena. Vi a mis jugadores metidos, querían ganar el partido”.
“Faltan tres partidos y vamos a seguir luchando”, añadió el técnico merengue, tras un partido marcado por la polémica.
El Sevilla empezó dominando a un Real Madrid muy impreciso, que necesitó un cuarto de hora para meterse en el partido.
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Curiosamente, un gol anulado a Karim Benzema (12) asentó a los merengues, que empezaron a controlar más la pelota ante la intensa presión sevillista, pero cuando mejor estaban los blancos, Rakitic dejó de cabeza un balón en el corazón del área a Fernando que disparó para poner el 1-0 (22).
El equipo blanco no se vino abajo con el gol en contra y siguió buscando el tanto, con entradas por las bandas por donde corrían Vinicius y Odriozola, para intentar meter balones al área, aunque habría que esperar al segundo tiempo para que el equipo blanco diera más intensidad a su juego.
Tras el descanso, los blancos hundieron al Sevilla en su área, presionando y dando velocidad a su juego hasta que encontró el empate.
Marco Asensio, que había entrado por Marcelo (66), tardó sólo un minuto en conectar un disparo ajustado al palo que supuso el 1-1 (67).
El empate dio alas a los blancos que se fueron con todo hacia adelante, no dudando en disparar desde fuera del área, frente a un Sevilla, que ya sólo trató de defenderse y buscar el gol al contraataque.
Con el equipo blanco volcado sobre la portería contraria, una mano de Militao en el área merengue fue sancionada con penal tras revisión por el videoarbitraje, provocando la polémica del encuentro, ya que de esa acción había salido un contraataque que había acabado con un derribo de Benzema en el área que había pitado el colegiado.
El árbitro, tras irse a la televisión, acabó sancionando la mano de Militao y la pena máxima la transformó Ivan Rakitic poniendo el 2-1 (78).
“Normalmente no hablo nunca de esto, pero hoy estoy un poco enfadado. Si pita mano de Militao, hay mano del Sevilla también”, dijo Zidane tras el partido, refiriéndose a una jugada anterior, en la que los blancos también habían pedido penal.
Con el marcador en contra, el Real Madrid se lanzó al ataque buscando el empate, que llegó en el descuento cuando Kroos soltó un disparo desde la frontal del área que se coló tras pegar en Diego Carlos, despistando al portero Bono (90+3)