Con un golazo de Juan Fernando Quintero, volante colombiano, el equipo de la banda cruzada desequilibró el partido y le ganó la final de la Copa Libertadores a Boca Juniors por 3 a 1. La controversia que generó el encuentro y el enfrentamiento de los clásicos rivales convirtieron a esta definición en una de las más importantes en la historia del fútbol sudamericano.