
Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Como jugador fue estupendo, siempre yendo un paso más adelante que el rival, efectivo con la pelota, importante sin esta. Y ahora como entrenador, bueno como asistente, parece que su forma de entender el juego y de haber sido parte de este, le da una ventaja sobre otros estrategas, le permite ser más cercano a los futbolistas, entenderlos, pero también comprender lo que hay que hacer desde el banco. Esa mezcla, que ha venido perfeccionado con la selección de Bélgica (es la mano derecha de Roberto Martínez) tiene a Thierry Henry como primera opción para ser el entrenador del Mónaco luego de la salida de Leonardo Jardim.
Y aunque todavía nadie diga nada, medios franceses ya dan por hecho la llegada del ex Arsenal y Barcelona al banco del equipo en el que juega el colombiano Radamel Falcao García. De hecho, L’Equipe se atrevió a decir que todo sería oficializado este lunes, pues el sábado Henry le daría la noticia al español Martínez.
Le puede interesar: Henry, el francés detrás de Bélgica
Al parecer en el Principado quieren a alguien de la casa, con ideas nuevas y que le dé un bálsamo de vida a un equipo que en dos años pasó de ser campeón de la Ligue 1 a estar en puestos de descenso, eso sí teniendo en cuenta que muchas de las estrellas con las que logró el título en Francia se han ido a clubes más grandes.
Como jugador (1993-1999), Henry disputó 148 partidos con el cuadro monegasco, anotó 28 goles y dio 27 asistencias antes de partir a Juventus, conjunto en el que estuvo una temporada para luego dar el salto a la Premier League, torneo en el que tomó al conjunto Gunner y lo llevó a lo más alto.
Lea aquí: Mbappé, el niño que quiso seguir los pasos de Henry
Todo indica que faltarían pequeños detalles contractuales para que Henry y Mónaco hagan oficial lo que sería una unión por tres temporadas. Luego del encuentro de este viernes, en el que Bélgica venció 2-1 a Suiza por la Liga de las Naciones de Europa, el francés tomará un vuelo hacia la ciudad costera para terminar de cuadrar todo y ser presentado de manera oficial.