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Después de tres derrotas que dejaron dudas y una jornada de descanso que sirvió para recomponer el rumbo, la selección sub-19 de voleibol de Colombia finalmente celebró. Lo hizo este lunes en Tashkent con una victoria cargada de tensión: 3-2 frente a Cuba, en un duelo que se convirtió en el primer triunfo del país en un Mundial de la categoría.
Era un cruce entre dos equipos sin victorias, ambos golpeados por el calendario, pero con la urgencia compartida de ganar. Desde el arranque, Colombia dejó claro que esta vez no iba a repetir errores. Jugó con energía, decisión y un ritmo ofensivo que descolocó a los cubanos. El primer set, muy parejo, se inclinó a favor de los colombianos por 26-24.
El segundo fue incluso más contundente. Colombia dominó de principio a fin, mostró un juego colectivo mucho más firme y remató con autoridad: 25-18. Dos sets arriba y todo parecía encaminarse hacia un cierre tranquilo. Pero el deporte no se rige por guiones predecibles.
Del dominio al drama
En el tercer parcial, el equipo colombiano perdió el foco. Bajó la intensidad, cometió errores y dejó crecer a Cuba, que no desperdició la oportunidad. El set terminó 16-25, y con ello se encendieron las alarmas. El cuarto fue más preocupante aún: falta de orden, nervios y un juego deslucido que le dio a los cubanos el empate parcial con un 25-17.
Entonces, todo se definió en el quinto set. Colombia ya había vivido esta situación —lo había perdido ante Estados Unidos—, pero esta vez la historia fue diferente. Con el marcador 9-3 a favor, parecía resuelto, pero Cuba reaccionó y estrechó el margen a un tenso 14-13. Sin embargo, Colombia no cedió. Cerró el partido con temple y se quedó con el set 16-14, firmando su primer festejo en esta Copa del Mundo.
Colombia sumó 100 puntos en el partido: 52 por ataque, 20 por bloqueo, 3 por servicio y 25 gracias a errores de su rival. El capitán Maicol Ortíz fue figura indiscutible con 27 puntos, mientras Sedrith Hernández (14) y Samuel Martínez (11) también destacaron. Pero más allá de las cifras, el triunfo representa algo más profundo: una señal de crecimiento, una muestra de que el grupo sigue comprometido incluso en los momentos más adversos.
El próximo reto será este martes 29 de julio frente a Finlandia, el equipo más fuerte del grupo. Las chances de avanzar son mínimas, pero existen: Colombia necesita ganar 3-0 o 3-1 y que Estados Unidos pierda 0-3 o 1-3 ante Corea del Sur. Un escenario difícil.
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