Los Bucks derrotaron a los Suns y están a una victoria del campeonato de la NBA

Giannis Antetokounmpo está a un partido de ganar su primer campeonato de la NBA con los Bucks de Milwaukee.

Foto: Agencia AFP

Los Phoenix Suns siguen sin encontrar su mejor forma. Después de ganar los dos primeros juegos, el equipo liderado por Chris Paul perdió el norte y en la noche de este sábado sumó su tercera derrota consecutiva en la final de la NBA.

Con un marcador de 123 a 119 los Milwaukee Bucks sellaron un nuevo triunfo, esta vez fuera de casa, y pusieron la serie 3-2 a su favor. Si ganan el martes en el sexto partido, que jugarán de locales en el estado de Wisconsin, los Bucks de Giannis Antetokounmpo serían los nuevos campeones de la NBA.

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La principal arma de los Bucks este sábado fue que no hubo ninguna figura que predominara sobre las demás. De hecho, su juego de conjunto primó sobre la estrategia de los Suns, que demostró una dependencia total de la joven estrella Devin Booker.

De hecho, las tres figuras de Milwaukee, Antetokounmpo, Khris Middleton y Jrue Holiday, promediaron un nivel anotador de 30 puntos cada uno, lo que sepultó las aspiraciones de sus rivales en este juego.

La clave de la victoria de los Bucks estuvo en su temprana reacción en el segundo cuarto después de la embestida inicial de los Suns en el comienzo del partido.

Un ímpetu que los acompañó hasta el tercer cuarto, parcial en el que sacaron la diferencia que terminó siendo definitiva para poner la serie a su favor.

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De esta manera, y con la ventaja de jugar de local, el equipo de Milwaukee podría conseguir el martes su segundo anillo de la NBA, después del que consiguieron en 1971.

El desarrollo del partido

Los Suns salieron agresivos, con la intensión de hacer respetar su casa y de conseguir su tercera victoria. Con un Devin Booker que empezaba a enfilar su artillería para otra noche de cifras históricas y un Jae Crowder en modo bestia, parecía que la escuadra de Phoenix iba a dominar con tranquilidad el juego cinco.

Así lo hacía presentir el marcador parcial de la primera manga que los Suns se llevaron por un marcador de 37 a 21.

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Sin embargo, nada estuvo más alejado de realidad. Los Bucks de Milwaukee ajustaron sus líneas, le cerraron el tiro a Booker y con un Giannis Antetokounmpo liderando en ofensiva y defensiva se pusieron por delante en el segundo cuarto para irse con la ventaja en el descanso.

Una brecha que no haría otra cosa más que ampliarse y que una vez reanudado el partido, en el final del tercer cuarto, llegó a una diferencia de 10 puntos, con Milwaukee arriba con 100 puntos contra los 90 de los locales.

Y lo peor para Phoenix fue que, antes del último cuarto, el único que reaccionó fue Devin Booker, que se cargó a la escuadra al hombro con un partido espectacular de 42 puntos, aunque insuficiente para frenar el funcionamiento de la franquicia de Antetokounmpo.

Los Bucks, que se dieron cuenta pronto de la total dependencia de los Suns por Booker, se lanzaron al ataque para devorar a la presa y sellar el partido con una victoria a su favor.

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Y los Milwaukee Bucks hicieron muy bien el trabajo porque, a pesar de que los Suns mostraron reacción en los últimos compases del partido, jamás perdieron la ventaja que les dio la victoria.

Ni siquiera cuando Chris Paul se encendió y empezó a meter triples para acercar a los Suns porque, justo en ese momento, apareció la figura de Middleton para responder con la misma moneda y no dejar acercarse a los locales.

Y tampoco en el momento de mayor efervescencia, cuando los Suns se pusieron a un punto de la mano de Booker, que a pesar de estar en una de sus mejores noches, pecó por su inexperiencia en los últimos segundos del partido cuando regaló la posesión que le dio el partido a los de Milwaukee a través de su héroe, Giannis Antetokounmpo.

Ahora, Phoenix Suns tendrá que salir de casa a buscar una victoria afuera del valle para forzar un séptimo partido, que volvería a casa para definir la final. ¿Habrá campeón el martes?