Correr sobre pavimento ha sido y seguirá siendo una de las prácticas más apetecidas por los amantes del deporte base. Sin embargo, en los últimos años se ha presentado un crecimiento acelerado de corredores con mayor adrenalina para competir, que participan en competencias exigentes sobre terrenos irregulares, con sus riesgos y ventajas.
Son diversos los estudios que se realizan sobre este tipo de práctica, tratando de encontrar pros y contras de correr en terrenos que ponen a prueba algo más que el fondo de los atletas. En este ramillete de posibilidades encontramos las carreras con obstáculos realizadas en terrenos naturales o urbanos, con todo tipo de retos diseñados, que hacen parte de un divertido y a la vez exigente recorrido en el que los competidores ponen a prueba sus habilidades y destrezas.
En Colombia se hace la prueba llamada Desafío de Guerreros, 5 kilómetros de obstáculos artificiales y naturales en medio de escenarios campestres, agua, barro, ascensos, descensos, vegetación y un recorrido en el que la resistencia, el tesón, la fuerza, la habilidad y el amor propio de los participantes hacen la diferencia, aún más cuando en cada versión pueden encontrar variaciones en el trazado.
Algunas pruebas representan riesgos moderados pero reales para los competidores, y eso hace que su participación se convierta en algo más que una competencia por cruzar la meta. Se vuelve entonces una aventura, un reto a los sentidos, un momento de encuentro personal con los propios temores y limitaciones.
Se pensaría que este tipo de carreras son exclusivas de practicantes de alto rendimiento, adictos al gimnasio, al fitness o deportistas extremos. La realidad muestra que se han convertido en un escenario apto para competidores de todas las edades, géneros y estados físicos que buscan, a su ritmo y dentro de sus posibilidades, hacer el mayor esfuerzo para completar el recorrido de manera divertida.
Lo fascinante de estas pruebas es el encuentro con lo inesperado, ya que ningún corredor sabe cuál es el siguiente obstáculo, lo cual se ha convertido en una excusa para compartir con familia y amigos. Es el mejor motivador para la práctica continua de algún deporte en personas consumidas por la rutina y el afán de cada día que no veían un escape de sus cargas, preocupaciones y el inocultable estrés.
Lo ideal siempre será estar preparado para afrontar cualquier tipo de competencia, en especial una prueba exigente como esta, además de mantener una buena alimentación, fortalecer brazos, piernas y tobillos, tener una rutina de calentamiento, estiramiento, cardio y respiración.
Todo esto contribuye a vivir una mejor experiencia en la que el recorrido no se convierte en un viacrucis, sino en una gran oportunidad de disfrutar de un evento divertido, exigente y diferente, algo que seguramente aportará a la hora de afrontar las dificultades que la vida presenta en diferentes ámbitos.
Los próximos Desafíos son: en Bogotá, el 3 de octubre; en Medellín, el 8 de noviembre, y en Cali, el 6 de diciembre.
Las inscripciones están abiertas y las tarifas van aumentando conforme se acerca cada desafío. Para más información visite:
www.desafiodeguerreros.com.