En una carrera vibrante que estuvo marcada por la sanción a Valentino Rossi, el español Jorge Lorenzo se consagró campeón del Moto GP y obtuvo su tercer título mundial.
Como se esperaba, a esta última carrera del año no le iba a faltar emoción. Rossi salió último en la grilla de partida y en la primera curva ya había adelantado 10 posiciones.
Los chances del italiano de ser el campeón crecían a medida que pasaban las vueltas y escalaba posiciones en cada giro recorrido. En la vuelta 10 de la competencia Valentino ya era sexto. Por su parte, Lorenzo seguía líder y le sacaba una mínima distancia a Marc Márquez, que era segundo.
Promediando la carrera, en la vuelta 15, Rossi ya era cuarto y buscaba a toda costa el podio, pero su distancia de 11 segundos con Pedrosa, que era el tercero, lo alejaba del sueño de conseguir el octavo título de su carrera.
La emoción seguía en aumento en cada vuelta que se corría en el circuito Ricardo Tormo, en Valencia (España). A pocos giros de terminar, la pelea por ganar la válida se volvió una de las más recordadas de los últimos años. Los españoles, Lorenzo, Márquez y Pedrosa mostraron lo mejor de su talento y se sacaron chispas en los metros finales. Rossi era cuarto pero a una distancia difícil de recuperar y se apagó la ilusión de agrandar su historia con un nuevo título mundial.
Finalmente fue Jorge Lorenzo quien llegó en la primera posición. El piloto de 28 años que en 2010 y 2012 se coronó campeón de GP sumó su tercera corona mundial.
La clasificación general terminó con el español en lo más alto, con 330 puntos, Rossi segundo, con 325, y Márquez, tercero en el podio, sumó 242 unidades.
La felicidad se apoderó del nuevo campeón. Haberlo logrado en su país la dio una alegría doble: “Estoy muy feliz por lo que hemos logrado. Es algo muy grande”, declaró.
Esta temporada, sin duda alguna, estará marcada por la patada que le pegó Rossi a Márquez, la cual le significó la sanción de salir último en la carrera de ayer y lo alejó de volver a consagrarse. “Perder el título con normalidad me hubiera dolido mucho, pero lo habría aceptado. Perderlo así es muy triste”, dijo Valentino.
Fue un desenlace como todos lo esperaban. Y la emoción fue el mejor ingrediente para cerrar una gran temporada.