
Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Las comisiones económicas del Congreso aprobaron el Presupuesto General de la Nación para 2020, aforado en $271,7 billones, con un poco más de recursos para inversión a lo que propuso en principio el Gobierno (quedando en $47,5 billones).
También le puede interesar: Banco de la República mantiene la tasa de interés en 4,25 %
Antes del estudio de la ponencia apoyada por el Gobierno fueron derrotadas dos propuestas presentadas por miembros de la oposición. Sin embargo, no faltaron las críticas de los contradictores de la administración Duque por las cifras propuestas en materia de gastos, de inversión y resultados sociales.
Una de las mayores discusiones tuvo que ver con la enajenación de activos donde la Nación tiene una participación mayoritaria. El gobierno anticipó que no tiene entre sus metas inmediatas salir de la participación que tiene en ISA y Ecopetrol. El ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, advirtió que esos dividendos y las utilidades de las empresas donde la Nación tiene participación "van a alcanzar el año entrante a financiar una parte importante del presupuesto nacional. Vamos a tener unos recursos de $11,4 billones".
Recordó que el Estado tiene participación en 107 empresas de toda índole y el estimativo es que esas acciones valen unos US$50.000 millones.
Carrasquilla insistió en qué nada de lo que sea estratégico para el país se va a privatizar. "El gobierno no va a meter un mico en la ley de Presupuesto dándose facultades para privatizar empresas que hoy son propiedad del Estado", recordó que ya tiene esas facultades otorgadas en el Plan Nacional de Desarrollo.
La redestribución de recursos
Al hacer una recomposición de los diferentes recursos sectoriales, el conservador David Barguil, coordinador de ponentes, explicó que el servicio de la deuda se baja en $4,8 billones y el sector que más recursos va a tener es Educación con $44,2 billones y la inversión que se mantenía a la baja en el proyecto del Gobierno pasa a ser de $47,5 billones.
El Representante a la Cámara por el Centro Democrático, Oscar Darío Pérez, resaltó que este presupuesto tiene $7,2 billones adicionales para inversión que provienen de un menor gasto de funcionamiento de $2,5 billones, de reprogramacion de la deuda por $4,7 billones, y no de enajenación de activos.
La decisión de bajar la carga de la deuda y direccionar esos recursos para inversión es la decisión más importante para la dinamización de la economía en las regiones de Colombia, explicó Barguil.
Destacó la reducción que se registra en el presupuesto de funcionamiento, gasto de personal, el servicio de la deuda y al sector defensa se baja en medio billón de pesos y gana, además de Educación, el agro que se acerca a los $2 billones.
El coordinador de ponentes destacó que otros mayores recursos fortalecieron los presupuestos para ciencia y tecnología, cultura, deporte y recreación y transporte.
Al ministerio de Minas y Energía le asignaron un presupuesto de $3,9 billones que garantiza el pago de subsidios de energía y gas de las familias más pobres de la población colombiana.
Los excedentes de los recaudos de peajes de la red concesionada y no concesionada tendrán que ser invertidos en la región que impacte el peaje.
Se incluye la capitalización de la aerolínea Satena que se hace por el mecanismo de la asunción de deuda y se autoriza el pago de reclamaciones laborales en Aerocivil de un acuerdo que se firmó en la administración pasada.
El ministro de Hacienda dijo en las Comisiones Económicas que este presupuesto le da al Gobierno "el margen de maniobra necesario en un contexto internacional que es relativamente complejo".
El Congreso tiene hasta la última semana de octubre para aprobar el proyecto de Presupuesto que luego será sancionado por el Presidente Duque para convertirse en ley de la República.