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Como desfavorable calificó la gestión Fondo de Comunicaciones (hoy Fondo de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones) la Contraloría General por problemas en la gestión de cobro a los licenciatarios de los servicios de telecomunicaciones.
El informe precisa que también se detectó deficiencias en la ejecución de los programas de telecomunicaciones sociales, así como en la distribución de los excedentes derivados de los subsidios y las contribuciones de la telefonía local de la Ley 142 de 1994.
La Contraloría evidenció que la cartera del Fondo de Comunicaciones ascendió a $33 mil millones para 2008, de los cuales, el 50% presenta un alto riesgo de incobrabilidad, debido a la falta de confiabilidad de la información de los deudores, situación que además genera un aumento en el tiempo de vida de dicha cartera, disminuyendo por consiguiente, la probabilidad de cobro.
En la gestión de la cartera se observaron deficiencias relacionadas con obligaciones por valor de $255 millones en donde el Fondo perdió la acción coercitiva, advierte el informe, a la vez que admite que se evidenciaron deficiencias en la configuración de los títulos para la apertura de los procesos coactivos a los operadores morosos, y se incumplieron acuerdos de pago que se dejaron vencer, los cuales ascendieron a $2.590 millones para el año 2008.
Revela el informe de la Contraloría General que se determinó que tanto el Programa Compartel, como la Agenda de Conectividad y las distintas estrategias del Fondo de Comunicaciones, carecen de una coordinación de la gestión para aprovechar la infraestructura instalada, así como para articular las acciones tendientes a la prestación de un mejor servicio, con economía en la inversión de los recursos.
Programa Compartel
La Contraloría indicó que en cuanto al programa Compartel evidenció debilidades en la calidad de la prestación de los servicios de telecomunicaciones e incumplimiento de metas, relacionadas con instituciones educativas que no cuentan con el servicio de conectividad, interrupciones y lentitud en el servicio y obsolescencia de los equipos.
En lo concerniente con la administración de los recursos provenientes del sistema de subsidios y contribuciones de la telefonía local, el Fondo de Comunicaciones ordenó la transferencia de $6.717 millones desde 2004. Sin embargo estos dineros no ingresaron al Fondo de Comunicaciones y por consiguiente no cumplieron el fin previsto legalmente, en la medida en que las empresas deficitarias pudieron verse afectadas, al no recibirlos.
Por Elespectador.com
