Costo de vida aumentaría más de lo previsto este año

Aunque en el arranque de este año el costo de vida en Colombia se vio presionado por incrementos en el precio de los combustibles, el transporte, e incluso de los alimentos, el Banco de la República en un reciente informe estimó que la inflación en Colombia se encaminará hacia el 3% al terminar 2014 (el índice en 2013 fue de 1,94%). Sin embargo, expertos consultados advirtieron que posibles alzas en los precios del petróleo y en algunos productos de la canasta llevarían a que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) llegue a terrenos del 3,5%, saliéndose de las previsiones del banco central.

“Las expectativas de inflación a un año de los analistas económicos se encuentran alrededor de 3%”, aseguran las más recientes minutas del Banco de la República que detallan que en el arranque del año el aumento de precios se concentró en alimentos perecederos. Entretanto, el más reciente informe sobre el costo de vida dado a conocer por el Dane muestra que en enero y febrero la inflación fue de 1,12% -cifra mayor en 0,38% a la vista en el mismo lapso del año pasado-.

Juan David Ballén, analista de investigaciones económicas de la comisionista Alianza Valores, asegura que tiene una visión diferente a la del banco central y a la que ha mostrado hasta ahora el consenso del mercado. “Creemos que va a haber presiones por el lado de bienes como por ejemplo electrodomésticos importados que se ven afectados por el aumento del dólar (la divisa está en $2.044,58). Esperamos que la inflación bordee el 3,5% presionada por mayores precios de alimentos, transporte y gasolina”, explicó el experto quien cree que entre el Emisor no hay señales de alarma.

A una posible alza de alimentos en lo que resta del año, explica el presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), Rafael Mejía López, podrían ir ligados los efectos de un primer semestre con lluvias abundantes y con una probable época de sequía en el segundo semestre. Pese a estos pronósticos, el directivo asegura que el país cuenta con un buen abastecimiento de alimentos lo cual no causaría presiones en los precios de la canasta familiar.

“Al cierre de 2014, podrían influir combustibles y transporte de alguna forma. Lo primero podría generar que el precio interno de gasolina y acpm le pegue al aparato productivo. Sin embargo, no se avizoran amenazas en materia de inflación durante el año”, comentó el decano de la Facultad de Economía de la Universidad de la Sabana, Alberto Naranjo. Pese a esta estimación, cree que el Banco de la República podría subir las tasas de interés para evitar que el costo de vida se desvíe de la meta del 3%.

En cuanto al tema de alimentos, Naranjo manifestó que este rubro está presionando el índice, aunque manifiesta que este asunto “pasa por la estacionalidad que el Banco de la República tiene en cuenta a la hora de fijar su posición en materia de tasas de interés y de proyecciones. El Emisor tiene experiencia el con manejo de los precios de alimentos. Como es cuestión de ciclo no hay necesidad de actuar en los mercados para lograr la meta del 3%”.

Aunque en el arranque de este año el costo de vida en Colombia se vio presionado por incrementos en el precio de los combustibles, el transporte, e incluso de los alimentos, el Banco de la República en un reciente informe estimó que la inflación en Colombia se encaminará hacia el 3% al terminar 2014 (el índice en 2013 fue de 1,94%). Sin embargo, expertos consultados advirtieron que posibles alzas en los precios del petróleo y en algunos productos de la canasta llevarían a que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) llegue a terrenos del 3,5%, saliéndose de las previsiones del banco central.

“Las expectativas de inflación a un año de los analistas económicos se encuentran alrededor de 3%”, aseguran las más recientes minutas del Banco de la República que detallan que en el arranque del año el aumento de precios se concentró en alimentos perecederos. Entretanto, el más reciente informe sobre el costo de vida dado a conocer por el Dane muestra que en enero y febrero la inflación fue de 1,12% -cifra mayor en 0,38% a la vista en el mismo lapso del año pasado-.

Juan David Ballén, analista de investigaciones económicas de la comisionista Alianza Valores, asegura que tiene una visión diferente a la del banco central y a la que ha mostrado hasta ahora el consenso del mercado. “Creemos que va a haber presiones por el lado de bienes como por ejemplo electrodomésticos importados que se ven afectados por el aumento del dólar (la divisa está en $2.044,58). Esperamos que la inflación bordee el 3,5% presionada por mayores precios de alimentos, transporte y gasolina”, explicó el experto quien cree que entre el Emisor no hay señales de alarma.

A una posible alza de alimentos en lo que resta del año, explica el presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), Rafael Mejía López, podrían ir ligados los efectos de un primer semestre con lluvias abundantes y con una probable época de sequía en el segundo semestre. Pese a estos pronósticos, el directivo asegura que el país cuenta con un buen abastecimiento de alimentos lo cual no causaría presiones en los precios de la canasta familiar.

“Al cierre de 2014, podrían influir combustibles y transporte de alguna forma. Lo primero podría generar que el precio interno de gasolina y acpm le pegue al aparato productivo. Sin embargo, no se avizoran amenazas en materia de inflación durante el año”, comentó el decano de la Facultad de Economía de la Universidad de la Sabana, Alberto Naranjo. Pese a esta estimación, cree que el Banco de la República podría subir las tasas de interés para evitar que el costo de vida se desvíe de la meta del 3%.

En cuanto al tema de alimentos, Naranjo manifestó que este rubro está presionando el índice, aunque manifiesta que este asunto “pasa por la estacionalidad que el Banco de la República tiene en cuenta a la hora de fijar su posición en materia de tasas de interés y de proyecciones. El Emisor tiene experiencia el con manejo de los precios de alimentos. Como es cuestión de ciclo no hay necesidad de actuar en los mercados para lograr la meta del 3%”.