Ecopetrol alista su chequera

Luego de muchas horas de reuniones entre Ecopetrol y la multinacional suiza Glencore, prácticamente se  llegó a un acuerdo que le permitirá a la estatal colombiana asumir el mando en la Refinería de Cartagena.

Desde el pasado 16 de febrero el ministro de Minas y Energía, Hernán Martínez, había anticipado la decisión del Gobierno, de quedarse con el 51 % de las acciones de la suiza Glencore, que las había adquirido por un valor de US$ 658 millones.

La suiza batió en franca lid a la estatal brasileña Petrobras y a General Electric, a las que no les quedó otro remedio que aceptar la derrota.

Pese a que Ecopetrol recibió un pago muy alto por las acciones, se dijo en el sector que la estatal colombiana no había quedado conforme por su nuevo socio, ya que éste no tenía experiencia en el sector petrolero, sino en el carbonero.

Y el malestar creció unos meses después de que se enteró de que Glencore le ofreció a Petrobras subarrendar la refinería y ésta se debería encargar de su modernización. Sin embargo, nunca se concretó nada y meses más tarde la compañía suiza anunció que no estaría en condiciones de iniciar los trabajos.

Esta situación prendió las alarmas en el alto Gobierno, a tal punto que el presidente Uribe aprovechó su visita a Davos, Suiza, para hablar con el presidente de la multinacional.

El mandatario exigió a Glencore que iniciara los trabajos de la modernización de Cartagena, con el fin de duplicar la capacidad de la factoría, es decir, llevarla a producir 150.000 barriles diarios de combustible.

Allí se confirmó la reunión para el 16 de febrero, a la cual asistió Iván Glasenberg, presidente de Glencore, en la cual se abrió la posibilidad para que ésta dejara el negocio.

En el sector queda una sensación de que el Gobierno le perdonó la aplicación de las cláusulas de incumplimiento. Sin embargo, esto sólo se sabrá cuando se conozca la cifra pactada para que Ecopetrol pague a Glencore por el 51 % de las acciones.

El ministro de Minas y Energía, Hernán Martínez, había dicho que Ecopetrol pagaría por debajo de los US$ 658 millones que la multinacional Glencore desembolsó para hacerse al poder de la Refinería de Cartagena, a través de la Sociedad Reficar.

Una de las razones que adujo Glencore para abandonar el proyecto de modernización por US$ 3.000 millones fue la dificultad para la búsqueda de créditos en el mercado internacional.