Publicidad

El 26,7 % de los colombianos cree que la situación económica del hogar será peor en un año

Para conocer el impacto de la situación generada por el COVID-19 en la sociedad, el DANE realizó, con el apoyo técnico del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la encuesta Pulso Social.

Sigue a El Espectador en Discover: los temas que te gustan, directo y al instante.
28 de agosto de 2020 - 03:39 a. m.
La regla fiscal es el compromiso que tiene el gobierno para reducir la diferencia entre sus ingresos y su gasto.
La regla fiscal es el compromiso que tiene el gobierno para reducir la diferencia entre sus ingresos y su gasto.
Foto: Getty Images
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

La medición se hizo en 23 ciudades capitales de departamentos y áreas metropolitanas. En ellas, el 59,8 % de las personas que hacen parte de la jefatura del hogar (jefes de hogar y sus cónyuges) consideraron que en julio la situación económica de su hogar, en comparación con la vivida hace 12 meses, estaba peor; el 23,7 % afirmó que estaba igual; y el 13,3 % que estaba mucho peor.

Respecto a la pregunta de cómo será la situación económica del hogar dentro de 12 meses comparada con la presentada en julio, el 34,9 % de las personas que hacen parte de la jefatura del hogar respondieron que dicha situación será igual; el 30,1 % sostuvo que será mejor; y para el 26,7 % será peor.

En cuanto a la situación económica del país, el 63,3 % sostuvo que la presentada en julio de 2020 era peor frente a la registrada hace 12 meses, el 28,4 % afirmó que era mucho peor, y el 6,2 % sostuvo que era igual.

Además, el 36,3 % dijo que la situación económica del país en un año será peor que la registrada en julio, el 25,7 % mejor, y para el 22,3 % igual. Por otra parte, el 64,1 % de los hogares encuestados no tiene posibilidades de ahorrar alguna parte de sus ingresos, el 8,2 % sí, y el 27,6 % afirmó que no tiene ingresos.

El 43,1 % afirmó que los precios en el país aumentarán comparados con los de hace un año, el 23,6% que aumentarán poco, y para el 15,2 % fueron iguales. Para el 44,2 % de estas personas el empleo en el país disminuirá mucho en los próximos 12 meses.

En cuanto al estado de salud, el 60,5 % de los encuestados afirmó que en julio era bueno, para el 20,7 % era regular, para el 15,3 % era muy bueno, el 2,8 % malo, y el 0,6 % muy malo.

Por otra parte, el 72,6 % confirmó que estaría interesado en aplicarse la vacuna contra el coronavirus. Por sexo, este porcentaje se incrementa al 76,2 % en los hombres, y se reduce al 70,5 % en las mujeres.

En comparación con la rutina diaria que realizaba antes de la cuarentena o aislamiento preventivo, el 40,6 % sintió durante los siete días previos a la encuesta que no estaba sobrecargado con las tareas laborales, el 20,9 % afirmó que sí lo estaba, y el 38,5 % sostuvo que no realizaba tareas laborales o que no tenía empleo.

El 59,9 % dijo que no tenía una sobrecarga en los oficios del hogar, frente a la rutina diaria que tenía antes de la cuarentena o aislamiento preventivo; el 32,6 % sostuvo que sí tenía dicha sobrecarga, y el 7,5 % no realizaba tareas del hogar.

En cuanto a las actividades que ha realizado en los siete días anteriores a la encuesta para sentirse mejor, el 70,2 % de las personas hablaron con la familia o los amigos, el 37,5 % se enfocó en una actividad que tenía que hacer, y el 33,5 % realizó actividades físicas.

El 40,4% de las personas que hacen parte de la jefatura del hogar han sentido nervios; el 22,5% sintió tristeza; el 19 % presentó dificultades para dormir; el 18,7 %, cansancio; el 16,4 %, dolores de cabeza o estomacales; y el 13,6 % soledad.

La Encuesta Pulso Social evidenció que, desde que se implementó la cuarentena, el 42,0 % de las personas tuvieron que dejar de asistir a consultas médicas, el 20,3 % a citas odontológicas, el 15,2 % a tratamientos médicos, y el 14,3 % a reclamar medicamentos

El 87,9 % de las personas encuestadas dijeron que los niños y niñas de su hogar continuaron las actividades educativas o de aprendizaje desde que cerraron las escuelas y colegios; el 5,2 % afirmó que no las continuaron; y el 6,8 % dijo que los niños y niñas del hogar no asistían ni realizaban actividades educativas o de aprendizaje.

Sin embargo, los niños y niñas del hogar que no continuaron con las actividades educativas o de aprendizaje fue porque: el 31,8 % de los jefes de hogar no podía pagar la pensión por la reducción de ingresos económicos debido a la emergencia por el COVID-19; el 22,3% dijo que la institución educativa estaba cerrada por el COVID-19 y no había clases virtuales; y el 21,5 % argumentó que la institución educativa sí ofrecía clases virtuales, pero el hogar no contaba con dispositivos como computador, tablet o celular.

Conoce más

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscríbete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.