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Tras la pandemia, el comercio colombiano pasó por un prolongado invierno. El impacto negativo no solo se generó por los desafíos económicos propios de la emergencia sanitaria, sino por todo lo demás que llegó tras la llamada “reactivación”, como las altas tasas de interés, el débil crecimiento de la economía y la inflación.
Desde finales del año pasado esta situación ha logrado mantener una senda de crecimiento. Según la más reciente Bitácora Económica, elaborada por Fenalco, en junio la actividad comercial se mantuvo en terreno positivo.
“El 34% de los empresarios consultados dijo que sus ventas, expresadas en volúmenes o en valor descontando los efectos de la inflación, aumentaron frente al mismo mes del año anterior, el 40% las consideró muy similares y para el 26% fueron inferiores”. Parte importante de este comportamiento se debe a la prima, pues en junio se evidenció una alta afluencia de clientes en los establecimientos comerciales.
Sumado a lo anterior están las fechas especiales que se adelantaron en junio, como el día de padre y la denominada “Primatón”, la cual fue una estrategia que adelantó la federación para que los comercios implementaran un programa de ofertas atractivas para los consumidores.
La información recogida por Fenalco evidenció que las categorías de productos que más se destacaron fueron vestuario, accesorios y calzado.
Los grandes comercios señalaron un aumento en las ventas con tarjetas de créditos, lo que estaría relacionado al estímulo que estaría generando la reducción de las tasas de interés.
“Recordemos que en abril de 2023 la tasa de interés para la compra con tarjetas de crédito alcanzó un 47% y hoy están por debajo del 25%. También destacamos el buen momento del cluster de los vehículos, con la excepción de las estaciones de servicio, cuyas ventas siguen mostrando saldo en rojo ante el estancamiento en este año del consumo de combustibles”, detalló Fenalco.
Lo que le preocupa a la federación es que este incremento sostenido en la actividad comercial no se ve reflejado en la creación de puestos de trabajo. Para Fenalco, esto podría estar relacionado al importante aumento que ha tenido el salario mínimo, así como a la incertidumbre frente a los mayores costos que implica la reforma laboral y el difícil proceso de soslayar de automatización de labores manuales
“En cuanto a expectativas de desempeño de los negocios para el segundo semestre, el 34% de los consultados se declara optimista, un 53% piensa que la tendencia actual se mantendrá en tanto que un 13% respondió que las cosas empeorarán”, concluyó Fenalco.
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