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El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) informó que, en agosto, la tasa de desempleo en Colombia fue del 8,6 %. Esta cifra es 1,1 puntos porcentuales más baja que la consolidada en el mismo mes de 2024, así como 0,2 puntos porcentuales inferior a la registrada en julio del presente año.
“Este ha sido un año muy bueno para el mercado laboral. Hemos visto cifras muy bajas en la tasa de desocupación”, resaltó la directora del DANE, Piedad Urdinola.
Cifras más granulares revelan que en agosto la población en edad de trabajar (mayores de 15 años) superó los 40,74 millones de personas. De ellas, 23,81 millones estaban ocupadas, lo que representó un aumento de 393.000 frente al mismo mes del año anterior.
En contraste, la población desocupada se contó en más de 2,24 millones de personas. Esto significa que, en el último año, unas 265.000 personas salieron del grupo de los desempleados.
Finalmente está la población por fuera de la fuerza laboral, que son personas que, estando en edad de trabajar, no lo hacen por motivos de salud, estudio, porque realizan labores del cuidado del hogar no remuneradas, porque reciben una renta o porque no les llama la atención laborar.
Este grupo alcanzó los 14,69 millones de personas en agosto, lo que representó un aumento de 422.000. La mayoría fueron mujeres, con 417.000 nuevas vinculaciones, frente a apenas 5.000 hombres.
Las cifras también reflejan una de las complejidades del tejido social colombiano: la mayor carga de las labores de cuidado del hogar sigue recayendo sobre las mujeres. Según el DANE, en agosto 250.000 mujeres dejaron de buscar empleo para dedicarse a oficios no remunerados en el hogar.
Las industrias manufactureras fueron la rama económica que más generó empleos en agosto, con más de 199.000 nuevas plazas laborales. La siguieron construcción (178.000); transporte y almacenamiento (172.000); administración pública y defensa (147.000); actividades financieras y de seguros (102.000); alojamiento y servicios de comida (62.000); actividades inmobiliarias (44.000) y servicios públicos (14.000).
En contraste, agricultura, ganadería, silvicultura, caza y pesca fue la que más perdió puestos de trabajo, con 237.000 plazas. El terreno también fue negativo para comercio y reparación de vehículos (-165.000); actividades artísticas, entretenimiento y recreación (-57.000); actividades profesionales, científicas, técnicas y de servicios administrativos (-55.000) e información y comunicaciones (-11.000).
Al analizar el destino de los nuevos puestos de trabajo en agosto, el DANE reportó que la mayor parte (425.000) correspondió a obreros y empleados particulares. También aumentaron los trabajadores por cuenta propia (201.000) y los jornaleros o peones (55.000).
En contraste, otras ocupaciones registraron pérdidas: el trabajo familiar sin remuneración cayó en 168.000 personas; los obreros y empleados del Gobierno, en 60.000; los empleadores, en 56.000; y los empleados domésticos, en 4.000.
Ciudades con mayor desempleo
La problemática del desempleo no golpea a todo el territorio por igual. En el trimestre junio - agosto, Quibdó fue la ciudad con la tasa más alta de desempleo,la cual fue del 24,4 %.
Más abajo se ubicaron Riohacha (14,2 %), Ibagué (12,5 %), Sincelejo (11,4 %); Cúcuta (10,3 %), Tunja (10 %) y Montería (9,8 %).
Las que registraron una tasa más baja fueron Medellín (6,4 %), Villavicencio (7,3 %), Cali (7,8 %), Florencia (8,1 %) y Bogotá (8,2 %).
Continúan los malestares
Aunque las cifras del DANE muestran que el mercado laboral en el país continúa mejorando, ya que más personas tienen trabajo, el reporte también refleja que los principales problemas siguen latentes.
Ejemplo de esto es la informalidad, la cual en agosto fue del 55,7 %. Esta, por sí misma, demuestra un retroceso frente a la consolidada para el mismo mes del año pasado (cuando fue del 56 %), y también se establece como la más baja para un mes de agosto en los últimos cinco años.
Aun así, decir que más de la mitad de los trabajadores en Colombia son informales es preocupante (y siempre lo ha sido, ya que no es un problema exclusivo de este gobierno), pues son ocupados que carecen de acceso a la seguridad social.
Las mayores proporciones de informalidad se encuentran en agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca (donde la tasa de informalidad es del 86 %); también en alojamiento y servicios de comida (74,1 %); y en actividades artísticas y de entretenimiento (72,7 %). Cifras más bajas se encuentran en actividades financieras y de seguros (10 %); administración pública y defensa (11,2 %) y actividades inmobiliarias (14,3 %).
Las tres ciudades con mayor informalidad fueron Sincelejo (69,1 %), Valledupar (64,9 %) y Montería (64,1 %); en las que menos fueron Bogotá (34 %), Manizales (37 %) y Medellín (39,9 %).
La tasa de desempleo en los jóvenes sigue siendo de dos dígitos, del 14,8 %, aunque es la mínima que se ha reportado desde 2017.
Finalmente está la brecha de género que, en agosto, fue de 4,5 puntos porcentuales. El desempleo en los hombres fue del 6,7 %, mientras que en las mujeres fue del 11,2 %.
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