La reorganización empresarial es un mecanismo al que tienen derecho las sociedades en el país para, en el eventual caso de que haya una crisis financiera, ponerse de acuerdo con sus deudores y hacer los ajustes necesarios con el fin de salvar a la compañía. Este es un mecanismo que tiene que autorizar y vigilar la Superintendencia de Sociedades.
Esta mañana el superintendente de Sociedades, Juan Pablo Liévano, comunicó que actualmente en Colombia hay cerca de 2.500 empresas que atraviesan por un proceso de reorganización empresarial y liquidación, cifra que le genera preocupación, por lo que anunció la implementación de un plan de choque para mitigarla.
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“Con este plan de choque se busca resolver, de forma más expedita, las solicitudes hechas por las sociedades de diferentes regiones del país en pro de la conservación de la empresa como unidad de explotación económica y fuente generadora de empleo y siempre bajo el criterio de agregación de valor”, afirmó el directivo.
En concreto, se doblará la marcha del trabajo adelantado en la Superintendencia y se optimizarán los procesos. Con esto, se lograría evacuar en menos tiempo los procesos represados.
Bogotá es la ciudad que más acumula este tipo de solicitudes: 238 sociedades se han presentado para entrar en un proceso de reorganización y otras 22 que buscan acogerse a la liquidación judicial.
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“Solo en la capital del país se adelantan 1116 procesos de insolvencia. Por su parte, en las seis intendencias regionales se tramitan 1200 procesos”, comunicó la Superintendencia.
Este anuncio fue dicho después de que el superintendente se reuniera con el ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, y otros delegados.