En julio comienza venta de maleta separada en Latam

¿Cómo terminaron el 2016?

Muy bien. Un año en el que la economía tuvo un cambio importante, pasó de un crecimiento del 3,6 % al 2 %, inflación alta cercana al 6 %, dólar por encima de $3.000. En un escenario como ese, crecer 5,8 % en cantidad de pasajeros y 4 % en toda la operación de vuelos nacionales y 11% en pasajeros transportados por las aerolíneas de Latam en Colombia, es muy positivo. Hemos lanzado la marca Latam, mantenido liderazgo en cumplimiento y a fin de año hicimos el inicio del cambio de modelo de negocio, de forma tal que el pasajero pague por lo que valora. El balance es muy positivo.

¿El 2017 cómo lo ve?

Muy desafiante. El panorama económico de Colombia no cambia, no creemos en un repunte marcado, la demanda de pasajeros está estable, la reforma impositiva afecta el consumo, el IVA, la renta, y creemos que eso se está traduciendo en la industria aérea. No se van a tener crecimientos del 10 % como estábamos acostumbrados. Tenemos una posición conservadora en pasajeros transportados, estables, con un crecimiento de un dígito. Vamos a estar en línea con la economía del país.

¿Van a abrir nuevas rutas?

Vamos a abrir dos nuevas rutas: en marzo llegaremos a 19, una entre Cartagena y San Andrés, que son los destinos que más crecen, traemos muchos turistas del sur, de Argentina, Perú, Chile y Brasil, que buscan esos destinos. También a fin de marzo abriremos Medellín-Sarta Marta, que es otro destino que se está buscando muchísimo.

El ministro de Turismo de Argentina dice que se necesitan más vuelos Bogotá-Buenos Aires. ¿Ustedes están trabajando en eso?

Para el grupo Latam es muy importante poder llegar desde Bogotá hasta Buenos Aires sin escala. Ha sido un hito importantísimo. Empezamos con esa ruta el 15 de diciembre con cinco vuelos semanales y en julio vamos a pasar a siete vuelos semanales y eso confirma que la ruta va muy bien. Hay mucho atractivo en Colombia para los argentinos, ese mercado es muy importante, les gustan Bogotá, San Andrés y Cartagena, y también hemos abierto el vuelo Cartagena a Lima. Cartagena es sumamente importante para Latinoamérica, somos la primera línea aérea que conecta a Cartagena con Sudamérica, esa ciudad tenía muy buena conexión con Estados Unidos. Nosotros, además, tenemos desde Lima operaciones a muchas ciudades de Argentina, entonces se abre un abanico de oportunidades con excelentes tiempos de conexión. Podemos mover más pasajeros y el potencial es alto.

¿Sigue en pie el hacer de Colombia un “hub” para Latam?

Eso está quieto, no es el mejor momento por la situación económica de la región, Brasil ha tenido la peor crisis política y su PIB ha caído 10 % en dos años. Está en el congelador ahora mismo, pero en el futuro no lo vamos a descartar.

Tienen una flota nueva, ¿van a aumentarla?

No necesitamos un crecimiento en flota, le podemos sacar más jugo a la actual y eso significa que vuelen más horas al día. Hemos comenzado con vuelos a las 4:30 a.m. y el pasajero se educa con precios más competitivos en horarios que antes no tomaba sin la necesidad de incrementar aviones.

Los viajeros dejaron de salir del país por el dólar caro. ¿Eso se mantiene?

Lo sentimos en el primer semestre del año. Yo creo que el pasajero se acostumbra al dólar de $3.000. Hubo un cambio el año pasado, pero no es una tendencia para los demás años.

¿Los colombianos están viajando más en avión que en bus?

Efectivamente, eso ha pasado en todo el mundo, a medida que esta industria ofrece precios más asequibles, mucha gente empieza a moverse en avión. Y son dos opciones: quien volaba una vez al año o quien nunca lo había hecho. Eso ha pasado en Estados Unidos, en Asia, en Europa, en todas partes. Sabemos que en Colombia se mueven 0,7 viajes al año por habitante y en países desarrollados es 2 al año por habitante. El potencial es muy alto. Como sabemos eso, debemos ser capaces de ofrecer mejores precios, que el pasajero que no lleva maleta, pues que no pague por no llevar maleta, hoy todos pagamos por todo. No hay nada gratis. En julio de este año vamos a lanzar un nuevo esquema tarifario donde ofrecemos al pasajero distintas opciones, desde la más “promo” con el tiquete más económico si no está dispuesto a pagar por un equipaje, un embarque preferente, una silla preferente, la acumulación de kilómetros Latam, y en el otro extremo está el pasajero que valora todo eso y poder cambiar el tiquete cuantas veces quiera. En julio comenzaremos con la venta de la maleta separada, cuando entre a Latam.com verá todo eso. Así vamos a participar del crecimiento de que cada vez más pasajeros viajen en avión y menos en bus.

La tendencia es eliminar las pantallas de las sillas. Ustedes ya lo hicieron. ¿Ese es el futuro?

No es lo mismo un vuelo de 10 horas a uno de hora y media. Eso se está dando en todos los vuelos de corto alcance. De hecho, los nuevos aviones que Latam está comprando a Airbus ya no vienen con la pantalla, vienen con puerto USB para cargar. El motivo: una eficiencia en los costos, además porque las pantallas se vuelven obsoletas y los dispositivos electrónicos que llevan los pasajeros son cada vez más modernos. La gente ha recibido muy bien el sistema de entretenimiento de Latam.

¿Cuántos colombianos están suscritos a su plan de millas?

1’200.000 afiliados.

Ahora que tiene más cuerpo el tema de la paz en Colombia, ¿ustedes creen que el turismo sí va a subir y por esa vía el tráfico aéreo?

Sin duda. La paz trae muchas más oportunidades de crecimiento en el turismo y la conectividad internacional de Latam será fundamental. Pero hay mucho trabajo por hacer, no solo es la firma y el anuncio, pero vemos con buenos ojos el hecho de que el Estado está mirando cómo capturar esa oportunidad para que las regiones tengan la infraestructura necesaria, los servicios para que se vuelvan destinos turísticos que hoy no lo son. Incluso el colombiano va a conocer regiones que no conocía.