Empresas Públicas de Medellín (EPM) hizo un llamado de alerta sobre los bloqueos que se han presentado en las vías de acceso a Hidroituango, lo que ha frenado las labores de reparación de la presa que ayudan a disminuir los riesgos para las comunidades ubicadas aguas abajo de la presa.
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Desde este lunes cerca de 100 personas, que manifiestan se han visto afectadas por Hidroituango, se unieron al paro nacional y mantienen bloqueos en las vías de acceso al proyecto. Denuncian que la construcción de la presa ha generado serios problemas en las comunidades de la zona: daños medioambientales, desplazamientos y desempleo, entre otros.
Sin embargo, EPM pide el desbloqueo de las vías pues “la mitigación de los riesgos y el avance técnico requieren contar con un equipo de trabajo los 7 días de la semana, las 24 horas del día y los 365 días del año. Por ello, el bloqueo en sus vías de acceso en este momento por parte de manifestantes impide la realización de estas labores y ponen en riesgo varios de los frentes”.
Entre las obras que requieren el pleno funcionamiento de las vías se encuentra el proceso de taponamiento definitivo del túnel de desviación derecho, uno de las reparaciones que más influye en la mitigación de los riesgos de las comunidades aguas abajo.
EPM explica que “se avanza en el taponamiento definitivo del túnel o Galería Auxiliar de Desviación (GAD), con dos turnos de trabajo. Las características de estas obras requieren una laborar las 24 horas del día, pero debido a los bloqueos es imposible desplazar al personal hasta el lugar y retornar a los cuadrilleros a los campamentos para su jornada de descanso”.
La empresa agregó que “la operación del vertedero, que regula los caudales que bajan por el río Cauca al embalse y se descargan aguas abajo de la presa, también obliga a tener a los operarios disponibles las 24 horas del día. De lo contrario, es imposible el cierre o apertura de sus cuatro compuertas de manera oportuna, con el riesgo que esto implica para las comunidades que habitan aguas abajo”.
Asimismo, dentro de las obras principales hay una instrumentación cuya lectura se debe hacer de manera manual, lo cual exige contar con operarios durante las 24 horas del día.
EPM espera que Hidroituango comience a generar energía con sus dos primeras unidades, cada una de 300 megavatios (MW) de capacidad, a partir de 2022. Y espera que las seis unidades de generación restantes ingresen de manera paulatina, para completar 2.400 MW de capacidad instalada en 2025.