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El subdirector de Fedesarrollo, Mauricio Santamaría recordó que el mercado laboral colombiano se encuentra muy segmentado desde los años noventas porque los costos asociados a la nómina han crecido de manera sustancial. Insistió en que hay mucho impuesto a la nómina, lo que hace que generar empleo asalariado sea muy complicado.
Esta situación ha generado un crecimiento del trabajador cuentapropia que se ve obligado a esta condición por lo costosa que resulta la nómina para el empresario. Santamaría reconoció que esos empleos tienden a ser de mala calidad, de bajos ingresos y de poca duración, "los cuentapropia van cambiando de actividad cada rato y generan bajos ingresos".
Precisó que en las zonas urbanas hay por lo menos 1,5 millones de trabajadores de esta categoría. Para conseguir el desmonte de los parafiscales, a los que el Gobierno del Presidente Uribe siempre se ha opuesto, se requeriría de una reforma tributaria.
"Es una reforma que en mi opinión consiste en financiar los temas de aseguramiento y protección social, a través de impuestos generales, que puede ser con una contribución específica de un impuestos general que podría ser el IVA, en vez de impuestos a la nómina", explicó el subdirector de Fedesarrollo.
Recordó que se puede empezar a pensar en remplazar costos como la salud y los llamados parafiscales (Sena, ICBF y las cajas de compensación).
"Los reemplazaría con un impuestos específico dentro del IVA", reiteró Santamaría. Es decir un IVA la para seguridad social y de protección social.
Un informe de la Contraloría General muestra que de los 7,2 millones de personas que se encontraban subempleadas, en el segundo trimestre de 2007, a nivel nacional, 6,3 millones estaban en situación de empleo inadecuado por ingresos, 2,2 millones eran subempleados por insuficiencia de horas y 3,7 millones tenían empleo inadecuado por competencias.
Subempleo
El informe presentado por la Contraloría General dice que el mercado laboral colombiano muestra altas tasas de subempleo desde hace años, a pesar de que el desempleo ha disminuido. "El comportamiento deseable y lógico sería que ante el favorable desempeño económico y la disminución de la tasa de desempleo, el subempleo también disminuyera, lo que no ha sucedido", dice el estudio.
A juicio de la Contraloría, el Gobierno considera que incluso después de las reformas a la normatividad del mercado laboral (Ley 50 de 1990 y 789 de 2002), éste mantiene rigideces que no solo restringen la competitividad del país, sino que, paradójicamente, conducen a mayores niveles de desempleo e informalidad para la población más vulnerable.
Por Jorge Sáenz V.
