Prepensionados en Colombia: requisitos, beneficios y protección ante despidos

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En Colombia existe una medida de protección para los y las trabajadoras próximas a pensionarse, garantizando que su estabilidad económica no se vea afectada por un despido injustificado a tan solo unos años de alcanzar la edad requerida para poder hacerlo. Estamos hablando del Fuero de Prepensionado, un proyecto de ley que nació en el sector público hace ya varios años bajo la figura del “retén social” pero que en el presente es una realidad y se extiende también al sector privado.

Cabe recordar que para acceder a la pensión de vejez, la mayoría de los trabajadores debe haber cotizado aproximadamente 1.300 semanas y alcanzar la edad mínima, que a la fecha, en mujeres es de 57 años y en hombres de 62.

¿En qué consiste el fuero de prepensionado?

El fuero de prepensionado es una protección especial para quienes están a tres años, o menos, de cumplir los requisitos para acceder a la pensión de vejez. Esta protección se encuentra en el artículo 12 de la Ley 790 de 2002, que estableció que ciertos grupos vulnerables, incluyendo a los servidores públicos próximos a pensionarse, no podían ser desvinculados durante procesos de reestructuración estatal. Sin embargo, la Corte Constitucional amplió este derecho a trabajadores tanto públicos cómo privados, reconociendo que es una medida que garantiza especialmente los derechos a la igualdad, la dignidad y la seguridad social.

La Corte ha dejado claro que esta protección es un instrumento para garantizar derechos fundamentales y evitar que los trabajadores, al borde de la jubilación, puedan estar en riesgo, teniendo en cuenta la imposibilidad de reincorporarse al mercado laboral. Esto, a grandes rasgos, quiere decir que el despido de un prepensionado solo es legítimo si existe una justa causa debidamente comprobada.

¿Cuáles son los requisitos?

No basta con estar próximo a pensionarse. La ley exige que, además de faltar tres años o menos para cumplir los requisitos de pensión, el/la trabajadora pueda demostrar que este despido pone en riesgo el mínimo necesario para garantizar la supervivencia de ella y de su familia. Esto pasa generalmente cuando el salario es su única o principal fuente de ingresos y, debido a su edad, las dificultades para ser contratada nuevamente abundan.

¿Cuál es el acto a seguir si un prepensionado es despedido?

Si alguna persona próxima a pensionarse es despedida sin justa causa y se comprueba que el despido afecta su mínimo vital, el camino a seguir es interponer una acción de tutela para reclamar su reintegro y el pago de los salarios que no se le fueron pagados durante ese tiempo.

La Corte Constitucional ha protegido reiteradamente a estos trabajadores, reconociendo que la estabilidad laboral reforzada es una garantía para la realización efectiva de los derechos fundamentales.

Aunque la figura del fuero de prepensionado es una realidad en el papel, el reto sigue siendo su cumplimiento real a lo largo y ancho del país. La tarea que recae en los empleadores y las autoridades laborales, consiste en garantizar que ningún trabajador a puertas de su pensión sea privado de su sustento y de una vejez digna.

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