Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
La meta es junio de 2012: el mes escogido para que la Alianza del Pacífico nazca oficialmente. Será la fecha en la que, después de múltiples reuniones de más de un año, de sinergias entre México, Perú, Chile y Colombia para ampliar sus mercados en Asia, y de acuerdos en promoción de inversiones, se firmará el documento constitutivo de este nuevo bloque.
“Es un paso importante hacia la integración que los cuatro socios se han propuesto en la homologación de títulos profesionales, la integración bursátil y el libre flujo de exportaciones, capitales y personas”, señaló Sergio Díaz-Granados, ministro de Comercio, Industria y Turismo.
Las buenas perspectivas de esta unión (ver infografía) están alimentando el interés de los vecinos regionales, y países como Costa Rica y Canadá ya le han expresado a los miembros fundadores su deseo de participar como observadores del proceso, la antesala a una posible unión.
Es, en realidad, un interés que también funciona como medida de protección en momentos en que la difícil situación económica de Europa y Estados Unidos ha inspirado la adopción de medidas proteccionistas en América Latina, las cuales han inspirado roces en toda la región, como el intercambio de críticas entre México y Brasil por el comercio de vehículos, o la protesta de más de 15 países ante la OMC por las restricciones de Argentina a las exportaciones.
Pero la apuesta colombiana no se limita a la región. Otro de sus triunfos en materia de política exterior tendrá lugar la próxima semana en Barranquilla, cuando se finiquite su ingreso como miembro pleno al grupo de inversión de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE), uno de los principales foros económicos, conformado por 34 países responsables de la producción del 53% de la riqueza mundial.
Un paso más hacia el objetivo trazado desde el primer día del gobierno Santos: ingresar a las principales instancias económicas del mundo. Deseo que en cinco días ha recibido el apoyo de dos mandatarios: Mariano Rajoy, jefe de gobierno de España, y Barack Obama, presidente de Estados Unidos.
La inclusión le permitiría al país seguir por la senda creciente en materia de Inversión Extranjera Directa (IED), rubro en el que registró la entrada de US$4.208 millones en el primer trimestre del año, lo que para el Banco de la República significó un avance del 30,2% frente al mismo período de 2011.
El panorama es posible. Así lo confirmó la agencia de deuda Fitch, según la cual la calificación de deuda podría mejorar en los próximos meses. “Si sigue el mismo camino, con estabilidad macroeconómica, buscando medidas para acelerar el crecimiento y reducir las debilidades estructurales de las finanzas públicas, va a mejorar su calidad de crédito”, señaló Erich Arispe, su jefe de calificaciones.
Sin embargo, tantas promesas de un futuro sin complicaciones han suscitado las críticas de congresistas, empresarios, académicos y sindicatos, quienes han asegurado una y otra vez que el proceso de internacionalización colombiano terminará llevando a la quiebra especialmente a los productores agrarios.
El Gobierno ha aprovechado estas buenas noticias para disipar los temores de los ganaderos ante la inminente entrada de miles de toneladas de carne con la puesta en marcha del TLC con Estados Unidos. “Los diez años de desgravación son un tiempo prudencial en el que los ganaderos colombianos podrán ganar competitividad, no sólo para servir el mercado local, sino para incursionar con éxito en otros mercados”, dijo Díaz-Granados.