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Elon Musk, la persona más rica del mundo, invirtió más de US$270 millones en donaciones para la campaña del ahora presidente Donald Trump el año pasado.
El multimillonario fue nombrado por el mandatario republicano para dirigir el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), encargado de recortar drásticamente el gasto público. Desde entonces, se ha embarcado en el desmantelamiento de varias agencias gubernamentales, a las que acusa de fraude y gestión descontrolada, dejando sin trabajo a miles de funcionarios.
La aprobación de Musk se ha deteriorado más después de que trató de influir en el voto en las elecciones federales de Alemania el mes pasado y luego pidió que Estados Unidos se retire de la OTAN y deje de pagar por la defensa de Europa.
Como dijo el periodista John Yoon en The New York Times, “desde actos de vandalismo hasta un desplome en las acciones, la indignación contra Elon Musk se ha volcado en su empresa de vehículos eléctricos”.
Lea: Así es como los actos de Musk están afectando a Tesla
¿Símbolo político?
El vehículo eléctrico se está convirtiendo en un símbolo político prorepublicano por la estrecha relación que tiene el director ejecutivo de la empresa y el presidente Trump.
De acuerdo con los expertos, las acciones de Tesla se mantendrán volátiles, como en las últimas semanas. Este martes cerró en US$287,99 en Wall Street, un 3,4 % por encima del cierre anterior. “Vemos margen para que las acciones pongan a prueba nuestro pronóstico bajista de 200 dólares y nuestro pronóstico alcista de 800 dólares en los próximos 12 meses”, dijo Adam Jonas, analista de Morgan Stanley, en un informe reciente.
Hubo un tiempo en que tener un Tesla se traducía en una alta probabilidad de que el conductor fuese un experto en tecnología con conciencia ecológica (aparte de tener poder adquisitivo), pero ahora para muchos significa un respaldo a la política de Musk, consejero de Trump. Incluso algunos usuarios protestan con stickers en sus coches con mensajes como: “Compré este (vehículo) antes que de saber que Elon estaba loco”.
Los esfuerzos de Musk por despedir a miles de empleados federales y desmantelar agencias gubernamentales han provocado protestas contra Tesla en al menos 100 ciudades durante el último mes.
“Nos cuesta imaginar algo similar en la historia de la industria automotriz en el que una marca haya perdido tanto valor tan rápidamente”, anotó Ryan Brinkman, analista de J.P. Morgan, en declaraciones a Axios.
En los dos primeros meses de 2025, las ventas de Tesla han caído un 71 % en Alemania, un 45 % en Noruega, un 44 % en Francia y un 44 % en España, según los datos de matrículas publicados por Electrek.
Las ventas también han caído en los mercados clave de California y China, según informó Bloomberg, pero es complicado saber cómo han evolucionado las ventas en Estados Unidos, ya que Tesla no ha dado datos oficiales. No obstante, las matrículas de Tesla en ese país cayeron un 11 % en enero, según S&P Global Mobility.
Sigue la mala racha en Europa
Las ventas de Tesla cayeron en Europa desde principios de año, frenadas por la reputación de Musk, pero también por la espera de una gama de nuevos modelos.
Tesla redujo sus matrículas en un 49 % acumulado en los meses de enero y febrero en la Unión Europea, cayendo a 19.046 vehículos y un 1,1 % de cuota de mercado, según cifras publicadas el martes por la Asociación de Constructores (ACEA). Aunque en general las matrículas de vehículos eléctricos, la especialidad de esta marca estadounidense, han progresado en un 28,4 % durante el mismo periodo en la UE, alcanzando 255.489 vehículos y un 15,2 % del mercado.
Musk está pagando su alianza con el presidente Trump. “Mucha gente no está alineada con sus posiciones”, dijo Matthieu Noël, analista de Roland Berger, a AFP. Pero, aseguró, todavía es difícil decir si “esto está teniendo un impacto real en la marca o si es temporal”.
Paralelamente, la marca pionera en eléctricos enfrenta con su gama envejecida una avalancha de nuevos modelos por parte de sus competidores, tanto europeos como asiáticos.
Tesla, que contribuyó a crear el mercado de los vehículos eléctricos, “ya no se posiciona con los mejores productos”, estima Noël. Los problemas de fiabilidad y la retirada masiva del Cybertruck también pueden haber influido, según el analista.
También lea: La mala hora de Tesla: propietarios reemplazan sus carros en EE.UU.
La empresa llamó a revisión a más de 46.000 camionetas Cybertruck cuyos paneles de carrocería podrían caerse a causa de un defecto en el pegamento utilizado en su fabricación, anunció el pasado jueves la Agencia estadounidense de Seguridad en Ruta (NHTSA).
“El refuerzo, un recubrimiento exterior compuesto por paneles de acero inoxidable, puede desprenderse y separarse del vehículo”, explicó el organismo. El grupo reemplazará gratuitamente las partes defectuosas.
Los 46.096 vehículos involucrados en este llamado fueron fabricados entre noviembre de 2023, cuando comenzó la producción comercial de la Cybertruck con su silueta futurista, y el 27 de febrero de 2025.
El motivo de la caída de las ventas varía entre los expertos, los optimistas creen que el crecimiento de las ventas se reanudará cuando Tesla aumente la producción de su Model Y actualizado y después de que la compañía lance un nuevo modelo de menor precio a finales de este año.
Los ataques contra Tesla
Detractores de Musk han atacado tiendas de Tesla, estaciones de carga e incluso vehículos de sus clientes en el segundo mandato de Trump, tanto en Estados Unidos como en el extranjero.
La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, dijo que la reciente ola de ataques al fabricante de automóviles eléctricos califica como “terrorismo interno” y prometió imponer penas severas a los responsables. Bondi afirmó que el Departamento de Justicia “ya ha acusado a varios implicados, incluso en casos que involucran cargos con sentencias mínimas obligatorias de cinco años”.
Estas declaraciones se dieron tras un incendio en un taller especializado de Tesla en Las Vegas que dañó cinco vehículos, según la policía de la ciudad.
“Al llegar los agentes, localizaron varios vehículos envueltos en llamas y la palabra ‘Resistir’ pintada con aerosol en el edificio”, declaró la policía.
En las últimas semanas, varios vehículos, concesionarios y estaciones de carga de Tesla fueron vandalizados en Estados Unidos y Europa.
Una estación de carga de Tesla en el estado estadounidense de Massachusetts fue incendiada intencionalmente a principios de marzo, según informaron las autoridades, mientras que en Colorado la policía declaró el mes pasado haber arrestado a una mujer por vandalizar un concesionario con artefactos incendiarios.
Esta semana, la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) anunció la creación de un grupo especial encargado de perseguir los ataques contra los vehículos y los concesionarios. El director adjunto para los Asuntos Públicos del FBI, Ben Williamson, confirmó en su cuenta de X que ese grupo especial se creó conjuntamente con la Oficina de alcohol, tabaco y explosivos (ATF).
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