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La súbita renuncia de Ferdinand Piech a la presidencia de Volkswagen AG reveló una fricción dentro del clan multimillonario Porsche-Piech que controla al fabricante de automóviles, lo cual amenaza complicar la búsqueda de un sucesor.
Wolfgang Porsche, de 71 años, presidente del holding familiar, se opuso a la iniciativa de su primo de 78 años destinada a destituir al máximo responsable ejecutivo, Martin Winterkorn. Tanto Wolfgang Porsche como Winterkorn son ahora posibles candidatos para reemplazar a Piech.
La función de presidente está siendo cubierta temporalmente por el dirigente sindical de IG Metall, Berthold Huber. Con divisiones en el clan Porsche-Piech, cuya tenencia de 50,7% de acciones ordinarias de VW está valorizada en unos 13.700 millones de euros (US$14.900 millones), encontrar un candidato que sea aceptable para los líderes sindicales, su estado natal y el accionista, Baja Sajonia, además de facciones dentro de la familia, puede constituir una dificultad. Y Piech todavía tiene influencia.
“Habrá que ver cómo resulta la disputa dentro de la familia”, dijo por teléfono Daniel Schwarz, analista de Commerzbank AG con sede en Fráncfort. “Piech todavía puede frenar algunas decisiones”.
Además de Winterkorn y Wolfgang Porsche también puede ser un candidato neutral Wolfgang Reitzle, presidente del fabricante alemán de autopartes Continental AG, informó el diario Sueddeutsche Zeitung. El consejo supervisor de VW tiene previsto reunirse el 4 de mayo, la víspera de la asamblea de accionistas.
“Es lógico suponer que Winterkorn, dado su apoyo generalizado, será coronado pronto como presidente”, dijo en una nota Max Warburton, analista en Sanford C. Bernstein. “La rapidez en la introducción de reformas impulsadas por el mercado dependerá probablemente de quién termine siendo el sucesor como máximo responsable ejecutivo”.
Tenencia de Piech
Piech continúa siendo miembro del consejo de administración del vehículo de inversión familiar Porsche Automobil Holding SE. También puede ejercer influencia en el seno de la familia, que cuenta con acuerdos establecidos para votar en bloque. Esto significa que podría sostener discusiones para hallar un sucesor, dijo una persona al tanto de la estructura familiar.
El poder de Piech deriva de su tenencia de 13% de las acciones ordinarias de Porsche SE, dijo la persona, que pidió no ser identificada dado que los detalles son privados. Si se propone vender dichas acciones, debería ofrecerlas en primer lugar a otros miembros de la familia.
Esto significaría que el clan —que tiene unos 35 integrantes, incluidos los 12 hijos de Piech— debería conseguir unos 1.800 millones de euros para comprarlas, sobre la base de los precios de las acciones preferentes sin derecho a voto cotizadas en bolsa de Porsche SE. La familia parece estar dispuesta a garantizar que no haya ninguna perturbación en la estructura de tenencia de acciones.
“Con gran lealtad al grupo Volkswagen y a sus 600.000 empleados, continuaremos asumiendo nuestra responsabilidad como accionista principal”, dijo Wolfgang Porsche en un comunicado emitido por el holding.
El clan Porsche-Piech, todos descendientes del creador del VW Beetle, Ferdinand Porsche, ha capoteado dichas perturbaciones antes. En los ochentas, cuando el hermano mayor de Piech quiso vender sus acciones a inversores árabes, las familias se unieron para comprar su parte. Por esa razón la parte Porsche de la familia tiene un número ligeramente mayor que el lado Piech. No obstante, las lealtades entre los miembros no están determinadas por sus apellidos.
Por Bloomberg
