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Tras las decisiones del Gobierno de ponerle aranceles a los aceros importados (hasta 30 %), el sector siderúrgico nacional podría fortalecerse; sin embargo, la viabilidad para que no afecte al sector de la construcción y el empleo está en debate. Según el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, las medidas tomadas prevén que no se perjudicará a la vivienda de interés social, una de las recientes críticas de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol).
Luis Carlos Reyes, jefe de la cartera de Comercio, dijo que la industria del acero es estratégica porque es usado por las industrias automotrices, electrodomésticos, medicina, construcción, entre otras.
“Precisamente, y para beneficio también de esas otras industrias, las medidas de defensa comercial adoptadas van de la mano del Pacto por el Acero con el que buscamos aumentar la productividad y la competitividad del sector siderúrgico y llevarlo así a la producción de bienes con alto valor agregado y con el potencial para transformarse en una industria exportadora de largo plazo”, dijo.
En primer lugar, el objetivo del Pacto por el Acero es “equilibrar las condiciones de competencia frente a las importaciones”. Según el Ministerio, las “prácticas desleales” de comercio internacional han afectado a la industria del país. Por lo que aseguró que la decisión es estratégica para el desempeño de Colombia, mientras genera empleo y contribuye al desarrollo.
“Estas medidas se han adoptado como resultado de investigaciones transparentes y adelantadas con rigor técnico, que demostraron que se presentan las condiciones para su establecimiento”, comunicó la entidad pública, y agregó que se cuenta con el sustento legal, con base en la aplicación de la política de aranceles desde el Plan Nacional de Desarrollo.
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Lo próximo que hará la cartera de Comercio será adelantar un estudio de viabilidad que será entregado en el primer trimestre de 2025. Esta investigación facilitará la puesta en marcha de una planta de aceros planos, con base en estos factores:
- Demanda de acero plano nacional y extranjera.
- Competencia en la industria.
- Tendencias de precios del acero.
- Costos de producción local.
- Identificación de clientes
- Proveedores de materias primas y servicios.
- Definición del diseño de la planta.
- Equipos.
- Disponibilidad de los recursos energéticos.
¿Qué dice el sector de la construcción?
Ahora, el gremio de la construcción alertó el frío panorama que enfrenta el sector por la reducción de subsidios para vivienda de interés social y las nuevas medidas arancelarias. Camacol apuntó que estas políticas podrían afectar la producción de vivienda para las familias de menores ingresos, lo que impactaría en la demanda, la oferta y el empleo.
Esta salvaguarda y gravámenes al hierro, el acero y el aluminio, advirtió, incrementarían los costos de construcción.
El presidente del gremio, Guillermo Herrera, advirtió que 88 % de las importaciones de aluminio y 55 % de las importaciones de alambrón están afectadas por estos aranceles, lo que hace inviable la ejecución de proyectos VIS que ya estaban estructurados y en proceso de venta.
Además, pondrían contra las cuerdas a miles de empleos en un sector donde la mayor parte de la mano de obra está constituida por obreros, oficiales y operarios, quienes dependen directamente del desarrollo de estos proyectos.
Según Camacol, las medidas actuales están lejos de impulsar la reactivación del sector y, por el contrario, continúan profundizando la crisis que afecta tanto a la producción de vivienda como al empleo.
En respuesta, el Ministerio realizó una proyección con base en la matriz de oferta y utilización del DANE, y apuntó que la industria de aceros y laminados afecta solo “1,74 % del total de los costos de materiales, que son la mitad de los costos de la vivienda”.
Asimismo, agregó que el Ministerio de Vivienda que la medida apenas afectaría en “un máximo de 1,4 % del precio”.
La entidad de comercio concluyó el cuestionamiento de los analistas con que el precio impactará en 0,53 % en el precio de producción para el sector vivienda que requiera el insumo.
“Para la proyección de este impacto se tomaron en cuenta varios indicadores como la participación del acero en los costos de las edificaciones, la participación de las importaciones y del acero local en la construcción, proyecciones del alza del salario mínimo, entre otros factores”, comunicó el Ministerio.
¿Cómo van las ventas de vivienda?
Aunque en agosto de 2024 se registró un pequeño repunte en las ventas de vivienda respecto al mismo mes del año anterior, esta recuperación fue temporal. En septiembre, las ventas volvieron a caer 15,6 %, lo que apunta a un cierre de año similar al de 2023, con ritmos de construcción y ventas que se mantendrían 40 % por debajo de los niveles observados en 2022.
Para 2025, las perspectivas son igualmente preocupantes. Camacol destaca la necesidad de que el Gobierno revise de manera objetiva las políticas adoptadas y tome decisiones técnicas orientadas a la reactivación económica. En opinión del gremio, es fundamental garantizar los subsidios necesarios para el próximo año y evitar distorsiones en los costos de la construcción, de manera que no se profundice aún más la caída en la producción de vivienda de interés social.
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