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El precio internacional del petróleo y la economía colombiana están íntimamente relacionados. Mientras el país avanza en la transición energética y hacia la diversificación de los exportaciones, lo cierto es que el crudo todavía es el primer producto de exportación del país. Por lo tanto, el petróleo representa una parte significativa de los ingresos fiscales. Cuando su precio aumenta, los envíos de crudo generan mayores ingresos para el país, además un mayor precio del petróleo implica un ingreso significativo de divisas, fortaleciendo la balanza comercial y compensando las subidas en la tasa de cambio al apreciar el peso.
Con mayores ingresos provenientes del petróleo, el Gobierno tiene más margen para financiar el presupuesto nacional, reducir el déficit fiscal y evitar endeudarse en exceso, cumpliendo así con las metas fiscales establecidas. En el Marco Fiscal de Mediano Plazo, la hoja de ruta de la economía colombiana para los próximos años, el Gobierno basó sus perspectivas económicas sobre supuestos como un precio internacional del crudo a US$83.
Desde la segunda mitad de 2024, la cotización del llamado oro negro ha venido en bajada, por cuenta de una menor demanda de grandes importadores (como China) y una mayor oferta por parte de los países productores en Medio Oriente, lo que ha llevado al crudo a tocar mínimos de US$70. En las últimas semanas, con la escalada de la guerra Rusia-Ucrania y otras tensiones geopolíticas, el crudo ha ido recuperándose.
Este viernes, 22 de noviembre, el petróleo subió a medida que las tensiones geopolíticas entre Rusia e Irán aumentaron. El petróleo referencia West Texas Intermediate subió a alrededor de US$71 por barril, aproximadamente un 5 % más en la semana, mientras que el Brent actualmente ronda los US$75.
El conflicto entre Rusia y Ucrania se ha intensificado rápidamente tras meses de desgaste, con el uso de misiles de mayor rabia por parte de ambas partes esta semana. Al mismo tiempo, Irán dijo que aumentará su capacidad de producción de combustible nuclear después de ser censurado por la Agencia Internacional de Energía Atómica de la ONU.
Un aumento en los mercados bursátiles también dio un impulso al crudo, aunque el repunte fue limitado por un dólar más fuerte que hace que las materias primas cotizadas en la moneda sean menos atractivas.
El petróleo ha oscilado entre ganancias y pérdidas semanales desde mediados de octubre, con un dólar fuerte, una amplia oferta e indicios de una demanda débil que proporcionan vientos en contra. Al mismo tiempo, las tensiones geopolíticas, incluida la renovación de la doctrina nuclear del Kremlin esta semana, han causado ganancias temporales, pero no han logrado proporcionar un impulso prolongado frente a las expectativas generalizadas de un superávit de crudo el próximo año.
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