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Que la estabilidad macroeconómica, producto del auge minero energético, se convierta en derecho fundamental fue el espíritu que guió el diseño de la Regla Fiscal, presentada este miércoles por el Gobierno, un proyecto que será radicado en el Congreso el próximo 20 de julio.
Se trata de un instrumento que busca darles orden y sostenibilidad a las finanzas públicas a través de tres fundamentos: que el Gobierno se endeude menos; ahorrar en épocas de bonanza, para que cuando lleguen las ‘vacas flacas’ haya recursos de los cuales echar mano, y aprovechar los flujos provenientes de la bonanza minero-energética, bajo la premisa de optimizar el gasto. Se aplicaría sólo para el Gobierno Nacional Central (GNC).
Con relación a la deuda, la iniciativa busca una reducción del nivel actual, 39,4% del PIB, al 28,4%, en un término de 10 años, con excedentes de los flujos minero-energéticos. Y una vez se alcance la meta, crear un fondo de estabilización de los recursos.
Como toda regla, tiene compromisos: que el Gobierno haga un ajuste fiscal, que para 2011 debe ser de por lo menos el 0,6% del PIB, generar un superávit del 1,3% del PIB y, como lo reconoce el investigador de Fedesarrollo, Mauricio Reina, “poner en cintura las vigencias futuras y reducir las exenciones tributarias”.
Para el ministro de Hacienda, Óscar Iván Zuluaga, “la Regla busca que los flujos provenientes de los recursos naturales puedan ser aprovechados por futuras generaciones, que se ahorren y se optimicen en un horizonte con menor deuda y sostenibilidad fiscal”.
Los beneficios
El sector privado recibió la iniciativa de manera positiva. Luis Carlos Villegas, presidente de la Asociación Nacional de Empresarios (Andi), dijo que “es un hecho de la mayor importancia que el Estado prepague deuda y ahorre con los recursos provenientes del auge minero, para que Colombia tenga una economía dinámica, diversificada y con empleo. No hay que tenerle miedo al petróleo o la minería, hay que tenerle miedo al mal gobierno”.
Agregó que con menor deuda se pueden financiar sectores como la salud, la educación y la infraestructura, así como proveer ayudas a sectores que generen plazas de trabajo.
De igual manera, habría menos presiones para la revaluación del peso. Así lo reconoce el ex ministro de Hacienda Juan Camilo Restrepo, “teniendo en cuenta que con el boom minero-energético llegan muchos recursos, esta situación se puede manejar si hay fondos que den estabilidad a la tasa de cambio, así como dirigir recursos a sectores diferentes al minero que generen empleo”.
Entre las bondades, el ex contralor Antonio Hernández, quien formó parte de los asesores externos en el diseño de la Regla, destacó que en la medida en que haya mayor equilibrio macroeconómico, las tasas de interés tienden a ser más estables.
Y el gerente del Banco de la República, José Darío Uribe, resaltó beneficios como optimizar el manejo de los recursos minero-energéticos para generar ahorro, con lo cual se evitan presiones sobre la tasa de cambio.
Otro beneficio será acercarse al grado de inversión. La calificadora Standard & Poor’s subió este miércoles de estable a positivo el panorama de la deuda colombiana.
Se viene una reforma a las regalías
Con la Regla Fiscal se hace más necesario modificar el régimen de regalías, provenientes de los recursos minero energéticos, para que los entes territoriales las inviertan mejor y el Gobierno central tenga la posibilidad de contar con ahorros de esta fuente.
En este sentido, el presidente Álvaro Uribe planteó presentar una reforma al Congreso, que incorpore los planteamientos que al respecto tiene el nuevo Gobierno, como destinar el 10% de las regalías a ciencia y tecnología. En el primer mandato de la actual administración se presentó en dos oportunidades, que no fructificaron en el Congreso. Las comisiones de empalme trabajarán en la iniciativa.
Uribe también propuso nuevamente gravar las pensiones altas, como una medida para generar recursos y para buscar equidad.