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El segundo paro arrocero duró 11 días y terminó gracias a un acuerdo firmado entre el Gobierno y los promotores del paro. Pero el documento es apenas el principio de una serie de acciones que se deben tomar para cumplir el objetivo: sacar a los productores de arroz de la crisis.
El compromiso central que adquirió el Ministerio de Agricultura es sacar adelante el pilar de la negociación: la resolución que fija un precio mínimo para el paddy verde, que es el grano sin procesar.
Se trata de una medida temporal, de acuerdo con la jefa de la cartera, Martha Carvajalino. Y se da para garantizar que los arroceros no estén produciendo a pérdidas. Eso sí, tampoco permite un margen de ganancia. Lo que se espera es que la norma ayude a corregir las distorsiones del mercado y, posteriormente, el precio suba.
Hasta ahora no se conocen muchos detalles de la resolución, cuyo borrador ya fue presentado por el Minagricultura ante la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) “con el fin de que esta entidad emita el concepto de abogacía de la competencia”.
Ese es el último paso que requiere el documento antes de ser expedido. El Espectador conoció que la nueva resolución fija un precio por tonelada para cada región, que quedaría así:
- Bajo Cauca: el monto quedará en $1.491.478. La región comprende los departamentos de Antioquia, Bolívar, Chocó, Córdoba y Sucre.
- Centro: el valor es de $1.589.489 para Caquetá, Cauca, Cundinamarca, Huila, Nariño, Tolima y Valle del Cauca.
- Costa Norte: el monto se fija en $1.512.785 para Atlántico, Cesar, La Guajira, Magdalena y el municipio de Yondó, en Antioquia.
- Llanos: queda en $ 1.457.387 en los departamentos de Arauca, Casanare, Guaviare, Meta, Vichada y el municipio de Paratebueno, en Cundinamarca.
- Santanderes: el precio queda en $1.555.398 para Norte de Santander y Santander.
Lo anterior busca aliviar las caídas en los pagos a los productores, que fueron del 11,8 % en 2024, según la cartera. Mientras que las estimaciones de la Federación Nacional de Arroceros (Fedearroz) apuntaban a que el año pasado la carga (125 kg) se vendía en unos $225.000, pero ahora está alrededor de $170.000 en Tolima y en $158.000 en los Llanos Orientales. La caída promedio ha sido cercana al 25 %.
La medida del paddy verde es apenas una parte de la regulación que busca establecer el Gobierno. Posteriormente, se va a “publicar para comentarios la resolución que someterá al régimen de libertad regulada de precios al arroz blanco”, dice el acuerdo suscrito.
Para que ello se dé, el Ministerio ha tenido discusiones con los demás eslabones de cadena, que son los industriales encargados de transformar el producto. El objetivo, en últimas, es que el precio nunca esté por debajo de los costos de producción para evitar pérdidas.
🍚Lea: Precio del arroz blanco en tienda: esto está en juego en el paro arrocero
🌾 Otras soluciones para el arroz
Para darle seguimiento al cumplimiento del acuerdo y buscar nuevas alternativas, se creó una comisión permanente con participación de ambas partes.
Uno de los asuntos claves por definir allí es establecer una medida de alivio para los productores que ya hayan vendido sus cosechas a pérdidas, antes de que se establezca la resolución del precio mínimo. También retomarán los puntos del primer paro, con el objetivo de que se cumpla y se amplíen beneficios como el apoyo directo a la comercialización, el Fondo de Solidaridad Agropecuario (FONSA) y el Fondo de Acceso a Insumos Agropecuarios (FAIA).
La Comisión ya quedó instalada y su siguiente sesión tendrá lugar el próximo martes 29 de julio de 2025, en ese sentido la secretaría técnica será asumida por el Ministerio de Interior.
Además, entre los puntos del acuerdo que se deberán cumplir se encuentran:
- Tarifa del Uso del Agua (TUA): el Ministerio de Ambiente realizará una mesa técnica con el Comité Nacional de Paro Arrocero con el fin de buscar una solución para el acceso justo al agua del sector agropecuario.
- Unidad de Gestión Pensional y Parafiscales (UGPP): el Ministerio de Hacienda liderará una mesa técnica con el objeto de revisar las fuentes de información, como el insumo a la resolución 209 de 2020 para la determinación de la presunción de costos.
- Controles a centros de acopio: la Policía Fiscal y Aduanera (POLFA), en coordinación con la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) se comprometen a realizar controles en los centros de acopio y en los molinos en los lugares acordados en la mesa, con el fin de revisar los stocks y sus orígenes.
🚢 Mercado internacional: un frentes por atender
La crisis interna del cereal no es ajena a la realidad exterior. De hecho, algunos factores internacionales han sumado preocupaciones y alertas para el producto nacional.
Por eso, el acuerdo que dio fin al paro contempla que el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo evalúe la viabilidad de promover la implementación de medidas de defensa comercial. Y que fije “medidas con fundamento en la política de aranceles inteligentes frente a las importaciones de arroz paddy y/o de arroz blanco si se verifican las condiciones que establecen las normas aplicables”, dice el documento.
¿Qué pasa con el arroz en el mundo y cómo afecta a Colombia?
En este escenario, el primer aspecto es que India liberó restricciones a sus exportaciones de arroz blanco partido; y, al ser el principal exportador mundial, puede afectar a Colombia por aumentar la oferta global. Aunque el arancel es del 80 % para este producto, existe el riesgo de que llegue de manera irregular por la frontera con Ecuador.
Para hacerle frente al contrabando, el Gobierno anunció una estrategia de control y vigilancia fronteriza intensiva durante 30 días, liderada por la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) y el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), el INVIMA, la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) y el Ejército Nacional.
La medida también es una respuesta a la queja recurrente de los productores no solo de arroz, también de papa y cebolla, principalmente. Esto representa un problema para ellos porque incrementa la oferta interna y presiona más los precios a la baja.
A esto se le suma que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) estima que la producción mundial de arroz alcanzará un máximo histórico en 2025-2026, con 555,6 millones de toneladas. Dicho incremento es consecuencia de mejores rendimientos y la ampliación de la superficie sembrada en India, Bangladesh, Pakistán y Vietnam.
Finalmente, otra preocupación son las importaciones. Tan es así que algunos de los promotores al paro, como Dignidad Agropecuaria, incluyeron en sus peticiones al Gobierno que limitara la entrada del grano y revisara o renegociara los tratados de libre comercio con Estados Unidos y la Comunidad Andina, ya que facilitan las importaciones. De hecho, a los arroceros les preocupa que en 2030 EE. UU. va a poder entrar el cereal sin arancel.
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