Un agro sin seguro

En un escenario donde la expansión de los seguros agropecuarios ha fracasado desde la óptica del Gobierno, el ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo Salazar, le “jaló” las orejas a las aseguradoras del país para que amplíen la oferta en este campo en vista de las tragedias que ha causado la temporada de lluvias, hecho que se suma a la volatilidad de los commodities agropecuarios.

Para esto, el Plan Nacional de Desarrollo –sancionado el pasado jueves– puso en marcha el marco normativo para que se abran las puertas a nuevos actores nacionales y extranjeros que estén interesados en el negocio de cubrir los riesgos del sector para así fomentar el desarrollo del campo.

Iván Darío Arroyave Agudelo, secretario privado y asesor financiero del ministro de Agricultura, le dijo a El Espectador que “en Colombia hay  una precaria administración de riesgo agropecuario. Tenemos el índice más bajo de Latinoamérica en cobertura de cultivos”. Explicó que el Gobierno echa a andar su plan en medio de un contexto donde sólo están aseguradas 45.740 hectáreas (0,9%) de un total de 4.830.381  sembradas. En otros países, como México,  26,63% de la producción está asegurada; en Argentina, 49,67% y en Brasil, 7,56%.

 Entre 2007 y 2010, sólo se aseguraron en Colombia 143.559 hectáreas, de acuerdo con cifras del Ministerio de Agricultura. Asimismo, se expidieron 25.802 pólizas y se cubrieron cultivos por $766.803 millones durante ese lapso. 

La nueva normativa del Gobierno busca, según Arroyave, “contrarrestar los factores que han restringido la oferta y la demanda en el mercado de los seguros agrícolas, el cual ha estado inactivo”. Explicó que el subsidio que da el Ministerio a los productores para financiar  60% de la prima, el cual sólo estaba destinado a cubrir riesgos climáticos, se extendió a riesgos naturales y biológicos. “Podemos incluir lo fitosanitario. Los problemas de cultivos van más allá de los riesgos específicos que tenía la Ley  69”, explicó el funcionario, quien dijo que la cartera de agricultura va a reglamentar por zona y cultivo “los riesgos específicos que se van a subsidiar”.

Además, el Gobierno permitirá dar recursos provenientes del programa Desarrollo Rural con Equidad (DRE) para financiar el subsidio de las pólizas de seguros agropecuarios. Arroyave explicó que la Dirección Nacional del Riesgo Agropecuario, que está en creación, va  a garantizar a los nuevos actores (aseguradoras y reaseguradoras) contar con mapas de riesgo y agregó que el Banco Mundial está trabajando de la mano con el Ministerio de Agricultura en el proyecto.

Firmas internacionales (aseguradoras y reaseguradoras), según el secretario privado del ministro, se están preparando para ingresar al país. “Empresas de Brasil, Argentina, México y Estados Unidos se preparan para venir a hacer cotizaciones de primas por sector. Vamos a buscar pólizas colectivas por subsector”, dijo. Esto significa que habrá pólizas para los cafeteros, productores de maíz, arroz y banano.

Para atender a los pequeños, indicó Arroyave, la estrategia es integrarlos a través de pólizas gremiales. Además, agregó: “las primas aquí fluctúan entre 7% y 14%. Es algo exagerado y lo queremos bajar con una oferta más holgada que tenga seguros integrales”.

En el campo de las aseguradoras nacionales, compañías como Suramericana de Seguros, La Previsora y  Colpatria están “tibiamente explorando”, según Arroyave. También corredores de seguros, como DeLima Marsh y Correcol, han manifestado su interés por incursionar en el negocio. También, la firmas reaseguradoras Swiss Re y Munich Re, para el secretario, están “supremamente optimistas a dar reaseguro a los cultivos en Colombia”.

Al respecto, fuentes de la Federación de Aseguradores Colombianos (Fasecolda) manifestaron que la causa de un bajo aseguramiento del sector agropecuario “está dada  por la ausencia de un mayor desarrollo institucional, normativo y de conocimiento acerca del riesgo agropecuario que permita un desarrollo masivo del producto y su sostenibilidad”.

Para el gremio de las aseguradoras, “invitar a compañías extranjeras no constituidas en Colombia no es la solución, ya que ellas también identificarán esas barreras para desarrollar estos seguros, lo que igualmente desincentivará su entrada al mercado colombiano”.

Fasecolda manifestó que si se abre el mercado a compañías de otros países en diferentes condiciones a las exigidas actualmente, “se dificulta la supervisión de la Superintendencia Financiera de Colombia”. Según la agremiación, esto dificulta garantizar que firmas extranjeras tengan al día requisitos de “solvencia y buenas prácticas”.

Para Fasecolda una opción es poner en marcha un sistema para administrar seguros (de carácter público, privado o mixto). Según el gremio asegurador, las políticas que se definan “deben tener un horizonte de largo plazo que justifique el esfuerzo realizado por las compañías y el Gobierno”.

Asimismo, el presidente del Banco Agrario, Francisco Estupiñán Heredia, consideró que la oferta de seguros para el sector agrícola en Colombia “no es suficiente” y señaló que las primas son muy altas debido a que “no existe una masa crítica necesaria”.

Estupiñán aseguró que “estamos en un círculo vicioso a pesar de que el Gobierno tiene un programa que subsidia hasta 60% del valor de la prima. Esto se puede aprovechar para hacer un llamado a la gente”.

En consideración del  viceministro de Agricultura, Ricardo Sánchez, es necesario que  “todos los sectores entiendan que asegurarse, más que un costo, es una inversión”.

Para poner el pie en el acelerador, el gremio cafetero ya manifestó su interés de adquirir una póliza gremial apenas la oferta aseguradora sea clara.