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Jericó está encumbrado en las montañas del suroeste antioqueño. Su clima frío se intensifica en la madrugada, cuando puede alcanzar temperaturas de hasta 10 grados. Esta madrugada del 23 de octubre no fue la excepción y, pese a la neblina que cubría el parque principal y el frío intenso que se metía entre los huesos, Alirio Fernández y su esposa, Nelly Ceballos, caminaron en medio de la oscuridad a las 3:30 de la mañana rumbo a las oficinas de la Secretaría de Hacienda, ubicadas a un costado de la catedral, en el parque principal.
Fueron los primeros en ubicar las butacas de madera para esperar hasta la una de la tarde a que abrieran la taquilla para comprar la moneda conmemorativa de la Madre Laura. “El frío era horrible, pero igual nos vinimos porque no queríamos quedarnos sin las monedas. Se sentía puro hielo, pero lo pasamos con agüita y conversando”, expresa doña Nelly con una enorme sonrisa de satisfacción, y agrega: “Es la primera vez que me veo sentada en la plaza a esta hora sin hacer nada y pasando bueno”.
Para ellos, como para la mayoría de los habitantes de este hermoso pueblo, la madre Laura lo representa todo. “Yo estoy seguro de que la moneda los jericoanos la vamos a tener como una reliquia. No nos va a interesar tanto el cambio, el valor nominal, sino el valor moral que representa, la fe, los milagros de la madre Laura, y para nosotros es como el amuleto que vamos a conservar en la casa o que vamos a llevar siempre”, explica don Alirio con gran orgullo.
Y mientras ellos y cientos de jericoanos hacían fila en la plaza principal, a pocas calles de allí, en el teatro Santa María, el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas; el gerente general del Banco de la República, José Darío Uribe; el alcalde del municipio, el gobernador de Antioquia, el alcalde de Medellín, el arzobispo de Cali, el obispo de Jericó, las hermanas lauritas y muchas personalidades más hacían la presentación oficial de la moneda.
En el anverso de la moneda está el rostro de la santa madre Laura, y en el reverso la catedral de Jericó, lugar donde fue bautizada. Es la tercera vez en la historia del país que una mujer aparece en un billete o moneda colombiana. En otras oportunidades, según el gerente general del Banco de la República, se han emitido 70.000 monedas conmemorativas. Esta vez y dada la expectativa y la devoción a la santa, inicialmente se sacaron 100.000 para llegar el próximo año a 500.000. La producción de cada moneda tiene un costo de $1.100.
Con el paso de las horas la fila en el parque de Jericó se tornó inimaginable, la policía debió hacer un listado y reducir de 10 a solo 5 monedas la venta por persona para que todos pudieran tenerla. “Yo creo que esto no va a dar un ´brinco´, somos 13 mil habitantes y no va a quedar ni en la tercera parte de la población. Estamos muy contentos al ver esta respuesta”, manifestó el alcalde de Jericó David Alonso Toro.
A la una de la tarde se abrió la taquilla. Nelly y Alirio entraron de primeros. Valieron la pena las nueve horas de espera. “Qué orgullo ser el primero en el país en tenerla”, manifestó Alirio. “Ver tanta gente muestra la fe que todavía tenemos”, agregó Nelly aferrada a sus monedas como a un gran tesoro.
Pero a otro extremo de la fila, la hermana Leonisa Lopera, misionera de “las lauritas”, miraba con preocupación la cantidad de gente. “Esperando a ver si logramos comprar una, a nosotras nos toca como a cualquier parroquiano, no hay privilegios”.
La moneda de $5.000 ya está a la venta en las oficinas del Banco de la República en todo el país. No sólo se podrá conservar como una reliquia para pedir favores a la santa Laura, sino que, como ocurre con las demás, servirá para comprar en cualquier tienda productos más terrenales.