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Tras salir de su proceso de reorganización empresarial, WOM anunció este lunes una jugada agresiva con la que busca aumentar sustancialmente su base de usuarios.
Se trata de un plan que ofrece datos, minutos y mensajes de texto ilimitados por $29.900. La empresa confía tanto en esta estrategia que decidió eliminar todos los demás planes, concentrando así su oferta en una única alternativa para el mercado.
“Será un plan permanente y sin letra pequeña. Todo será ilimitado, pues creemos que los colombianos tienen derecho a estar totalmente conectados todo el tiempo, sin importar su nivel de ingresos”, dijo Alexey Reznikovich, uno de los socios de la firma de inversionistas propietaria de WOM Colombia.
Como precisó el director de mercadeo de WOM, Iván García, la apuesta de la empresa se basó en que el 85 % de los consumidores en el país elige el operador por el precio, y en que más del 50 % no confía en la categoría (sorpresas que llegan en las facturas o servicios por las “letras pequeñas en los contratos”) y quiere pagar por lo que usa (una buena relación entre valor y beneficio). Este plan se llama “A lo bien” y está disponible desde hoy.
Hay que recordar que en este momento WOM tiene una base que supera los 6 millones de usuarios, lo que le brinda una participación en el mercado cercana al 8 %. Es el cuarto operador más grande en Colombia, por debajo de Movistar, Tigo y Claro, siendo este último el jugador dominante.
Para la empresa esta es una apuesta decidida, pues la competencia en el mercado colombiano es complicada, y más cuando se espera que en los próximos meses se apruebe la fusión entre Tigo y Movistar, por lo que más del 90 % de los usuarios quedaría en manos de dos empresas, mientras que el resto se repartiría entre WOM y los Operadores Móviles Virtuales (OMV).
Conviene recordar el llamado “efecto WOM”: cuando la compañía llegó a Colombia en 2021, sacudió el mercado con planes a precios altamente competitivos, lo que obligó a sus competidores a reducir sus tarifas para mantenerse vigentes.
Este plan “todo ilimitado” tiene el potencial de volver a sacudir la industria.
Sin embargo, el panorama actual no es del todo alentador para los operadores: el ingreso promedio por usuario (ARPU, por sus siglas en inglés) sigue siendo bajo, lo que dificulta que puedan igualar la oferta o reducir aún más sus precios.
En entrevista con El Espectador, Reznikovich explicó que la apuesta del operador a largo plazo es crecer en participación hasta llegar a un 20 %. Como inversionista, considera que ese es el punto mínimo en el que se podría posicionar la empresa para mantenerse competitiva en un mercado tan concentrado.
Para lograrlo, agrega la compañía, es fundamental que las autoridades en Colombia —como la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) y el Ministerio de las TIC— definan reglas claras que faciliten el crecimiento del sector.
En el marco del estudio sobre la fusión entre Tigo y Movistar, WOM planteó la posibilidad de utilizar las redes de sus competidores mientras continúa con la expansión de su propia infraestructura.
Cabe señalar que el operador ha invertido más de US$1.000 millones, lo que le ha permitido desplegar más de 5.000 antenas en todo el país.
Los inversionistas también aprovecharon para agradecer el respaldo del Ministerio de las TIC durante el proceso de reorganización, destacando que esta entidad es el principal acreedor de WOM, al representar por sí sola el 45 % de las deudas de la compañía.
Cabe recordar que, en enero de este año, el Ministerio decidió congelar temporalmente los compromisos adquiridos por WOM relacionados con el espectro de bandas bajas (excluyendo el componente de 5G). Esta medida otorgó un periodo de gracia que le permitirá a la empresa comenzar a cumplir con dichas obligaciones a partir de 2029.
Serían US$150 millones (unos 644.000 millones de pesos colombianos) los que tendría que empezar a pagar WOM en la mencionada fecha, teniendo en cuenta la inflación que se acumule hasta entonces. Un esfuerzo importante que hizo el país.
Una apuesta arriesgada ¿Pero sostenible?
La pregunta que surge tras semejante anuncio es si la empresa tiene la capacidad de manterse operativa a largo plazo. Y esto va más allá del bajo precio del todo ilimitado.
El primer componente es el financiero. WOM acaba de completar un proceso de reorganización empresarial, en el que se consolidaron deudas por más de $3,2 billones, las cuales deberá pagar en un plazo máximo de 18 años. A esto se suma las considerable inversión que deberá hacer en expansión de sus redes y en el cumplimiento de los compromisos adquiridos tras resultar beneficiada en la subasta del 5G (que por cierto, se espera que empiece a desplegar esta red en el último trimestre de este año).
Al respecto, Stan Chudnovsky, uno de los socios de la firma inversionista, asegura que las finanzas de WOM no solo les permiten sostener una apuesta tan agresiva como esta a largo plazo, sino también generar ganancias en el camino.
El segundo punto es la capacidad técnica. Aunque el operador ha hecho inversiones para aumentar paulatinamente su infraestructura instalada, es cierto que la misma es limitada y no necesariamente se iguala a la de sus compositores. Es decir, si esta estrategia le funciona ¿Estaría WOM en la capacidad de atender a más millones de usuarios sin que se saturen sus redes y se sacrifique la calidad del servicio?
Sobre esto Reznikovich detalló que su actual infraestructura es más que suficiente para atender la demanda de los cerca de 6 millones de usuarios. Sin embargo, no detalló cuál es la capacidad máxima que en este momento tiene WOM, argumentando que ese es un dato clasificado para la compañía.
Aun así, reconoce que esta capacidad financiera no es suficiente para sostener una operación que abarque el 20 % del mercado colombiano. Para lograrlo, insiste, se requiere que las autoridades establezcan condiciones que les permitan alquilar las redes de sus competidores mientras continúan ampliando su infraestructura propia.
Con esta estrategia, la firma inversionista detrás de WOM reafirma su compromiso de continuar siendo el operador retador en el mercado. De este modo, dejan claro que para que los precios sean atractivos y la calidad del servicio mejore, es fundamental que exista competencia real, y que el negocio de las telecomunicaciones no quede concentrado en solo dos operadores. Esto último habría ocurrido si WOM hubiera quebrado y la integración entre Tigo y Movistar se hubiera consolidado.
¿El plan más barato?
La promesa de valor de WOM es que se consolidará como el operador con el “todo ilimitado” más barato del mercado. Sin embargo, hay que tener en cuenta que las ofertas de los competidores son diversas, ya que se pueden encontrar paquetes prepago desde los $1.000.
Teniendo en cuenta esta competencia por quién ofrece el mejor servicio al precio más bajo, la Comisión de Regulación de las Comunicaciones (CRC) tiene a disposición de la ciudadanía un comparador de planes.
Usted puede acceder al mismo mediante el siguiente link y, de esa manera, elegir el plan que más se ajuste a sus necesidades y presupuesto.
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