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Después de que la ministra de Educación, Maria Fernanda Campo, se refiriera al anuncio de la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode) de convocar un paro nacional a partir de este miércoles e intentara impedir su realización, no se llegó a ningún acuerdo entre los educadores y el gobierno por lo que el paro se mantiene tal como se tenía previsto, tras diálogos que llegaron hasta cerca de las nueve de la noche de este martes.
El presidente de Fecode, Luís Gruvert, ha señalado que a pesar de la protesta se continuará con el intento de llegar a un acuerdo con el ministerio de educación frente a los tres puntos principales que son de su interés, nivelación salarial, salud y la suspensión de la evaluación por competencias para los docentes. Sin embargo, en este último aparte el gobierno dejó claro desde este martes que la suspensión de la evaluación “no es negociable”.
Frente a dicho punto Gruvert señalo que “hay unos avances pero hay que afinarlos y detallarlos para estar seguros que se cumplen las expectativas y ahí estamos buscando la fórmula”.
Ante la falta de acuerdo entre las partes se estima que son 334.000 los profesores que iniciarán este miércoles el paro indefinido debido a que “la junta considera que lo que se habló aun no satisface las expectativas del gremio, seguiremos discutiendo para buscar cómo esos puntos lleguen a un acuerdo. En el día de hoy (miércoles) seguiremos dialogando”, añadió Gruvert.
En cuanto al tema de incremento salarial, el Ministerio de Educación ha indicado que el Gobierno ha hecho ingentes esfuerzos por mejorar la remuneración de los maestros y por tanto “establecimos en el año 2013 una prima de servicios que empezará a pagarse desde el próximo mes a todos los maestros. Así mismo, al inicio de este año, creamos una nueva asignación salarial a quienes tengan título de maestría o doctorado”, tal como indicó la ministra Campo. De la misma forma ha destacado las labores del ministerio frente a una gestión para una mejora en los servicios de salud.
Pese a lo anterior Fecode no oculta su descontento frente a lo que señala como un descuido con el gremio y mantiene la decisión de un paro indefinido que afectará a más de ocho millones de niños que se quedarán sin clases.