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Luego de que el Ministerio de Educación decidiera imponer medidas preventivas a tres instituciones de Educación Superior (la Corporación Universitaria de Colombia, la Universidad Incca de Colombia y la Universidad Popular del Cesar), por irregularidades administrativas y financieras, la Universidad Incca de Colombia negó las acusaciones hechas.
De acuerdo con el comunicado que divulgó la institución, esta acata las recomendaciones del Ministerio de Educación pero a la vez da un parte de tranquilidad sobre el normal servicio educativo de la universidad.
Entre los hallazgos reportados por la cartera de Educación está que la universidad atraviesa una grave situación económica debido a que no tiene capacidad para pagar sus deudas a corto plazo y mucho menos para atender su operación normal de funcionamiento. Por esta razón, algunos docentes suspendieron sus actividades académicas.
La institución niega que se hubiera presentado alguna suspensión de la actividad académica normal durante el semestre que ya terminó por falta de pago de salario a algún docente, como lo aseguró la ministra Gina Parody.
Señala en el comunicado que no hay pruebas para inferir que los recursos por pago de las matrículas se estén utilizando para cosas diferentes a los objetivos misionales y a los servicios educativos para el cumplimiento de dichos propósitos.
“En un caso tan singular como el de la Universidad INCCA –cuyas directivas acababan de posesionarse al iniciarse el proceso de inspección y vigilancia-, es claro que no había transcurrido el tiempo suficiente para la aplicación de los correctivos que se sabían necesarios y por los cuales precisamente, hubo un cambio en el gobierno de la Universidad”.
Critica que en la visita regular no se contempló los mecanismos para evaluar los procesos de mejoramiento que la nueva directiva ya comenzaba a desarrollar o el programa de gestión de la misma. Es el caso, por ejemplo, de los hallazgos en el componente financiero: las indagaciones se hicieron a los cortes 31 de diciembre de 2014 y 2013, momento en el que no estaba aún la nueva directiva o no se habían logrado modificar los procesos ni señalar las alternativas a seguir.